Tras una brecha en la estación de refuerzo de Fourchon el viernes, al menos otras dos grandes compañías petroleras cerraron sus plataformas del Golfo de México, deteniendo el flujo de crudo a través de los oleoductos Amberjack.
Las plataformas Mars, Ursa y Olympus, con una capacidad de 410.000 bpd, fueron cerradas por Shell el jueves. Shell no dio una fecha prevista para la salida de las plataformas.
A Shell le siguió el viernes Chevron, que también cerró las plataformas que alimentan las líneas de Amberjack, entre ellas Jack/St. Malo (57.000 boepd), Tahiti y Bigfoot (75.000 bpd). El viernes, Equinor cerró su plataforma Titan en el Golfo de México, uniéndose así a Shell y Chevron. Titan es una plataforma pequeña que generalmente solo produce 2.000 boepd.
Se prevé que la estación de refuerzo de Fourchon sea reparada hoy mismo, tras haber perdido dos barriles de petróleo antes de ser cerrada. Aún se desconoce cuándo se reanudará la producción de la plataforma.
La parada del Golfo de México, que actualmente afecta a siete plataformas, se produce mientras el país lucha con los altos precios de la gasolina al por menor y los competitivos mercados del crudo y los productos refinados. Para reducir los costes de la gasolina, Estados Unidos ya ha retirado entre 800.000 y 1 millón de barriles diarios de su Reserva Estratégica de Petróleo.
Las reservas de crudo de Estados Unidos siguen estando un 5 % por debajo de la media de cinco años. Con 12,2 millones de barriles diarios, la producción de crudo de Estados Unidos está actualmente 900.000 bpd por debajo de su pico anterior a la crisis.
El hecho de que los precios del crudo coticen a la baja el viernes, aunque sigan siendo más altos que la semana anterior, puede haber frenado la tendencia a la baja de los precios de la gasolina al por menor en Estados Unidos. En vísperas de las elecciones de mitad de mandato, el gobierno de Biden ha presionado específicamente a la OPEP y a Arabia Saudita para que aumenten la producción de petróleo.