Las bolsas europeas están dispuestas a seguir la tendencia bajista de Asia tras un fin de semana marcado por el aumento de tensiones en Oriente Medio y el miedo a un conflicto regional más extenso.
Los mercados reaccionaron al inicio de la semana anterior, cuando se reportó un ataque de Irán a Israel, que incluyó cerca de 300 drones y misiles. Ahora, la atención se desplaza hacia la posible respuesta de Israel.
El oro y el dólar estadounidense se mantuvieron estables, mientras que el yen japonés, antes considerado un refugio seguro, cayó a su nivel más bajo en treinta años.
Este movimiento subraya la percepción de los inversores de que, aunque Oriente Medio representa un riesgo creciente, las tasas de interés siguen dominando la agenda económica.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, comunicó al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que EE.UU. se abstendrá de participar en cualquier contraofensiva contra Irán, buscando mantener el riesgo en la región bajo control.