Fuera de Rusia, Vladimir Putin tiene pocos amigos. Por lo tanto, debería extender un cálido espasibo a sus hermanos productores de petróleo de la OPEP+. Estos se han tomado a pecho su consejo de realizar importantes recortes de la producción. Para mantener la caída de los precios del crudo de referencia, la reunión de Viena del miércoles debería contener una reducción mayor de la prevista, de 1 millón de barriles diarios.
El lunes, el Brent subió un 4 % hasta superar los 88 dólares por barril. Pero desde el máximo alcanzado a principios de junio, ha caído más de una quinta parte.
Los fundamentos del mercado del petróleo preocupan a la OPEP+. También preocupa a Rusia.
En Occidente se imponen sanciones a su petróleo. La oferta rusa solo está siendo absorbida por los consumidores indios y chinos, ya que el crudo de referencia de los Urales se cotiza ahora a unos 65 dólares por barril, según S&P Platts. Ese importante descuento no existía antes de la invasión de Ucrania. Tanto el precio como el volumen disminuyeron en Rusia de un año a otro.
Energy Aspects informa de que la producción ha disminuido a unos 10,5 millones de barriles diarios, frente a los 10,5 millones de barriles diarios de septiembre del año pasado. Antes de invadir Ucrania, Rusia suministraba aproximadamente una décima parte del petróleo mundial.
De forma inusual, la OPEP+ está ahora dispuesta a conceder a los productores ajenos a su cártel, incluidas las multinacionales petroleras, una cuota de mercado. Esto demuestra la preocupación de la OPEP+ por la economía mundial. La demanda de gasolina, que representa el 43 % del consumo mundial en Estados Unidos, el mayor productor y usuario, ha disminuido. Según datos de Citi, en promedio mensual, ha disminuido más del 6 % desde el año pasado.
A medida que la OPEP+ se retira, los productores del mar del Norte, como la noruega Equinor, deberían salir ganando, especialmente en el suministro a Europa. El enorme yacimiento petrolífero en alta mar Johan Sverdrup, propiedad de Equinor, está aumentando la producción. Los perforadores de EE. UU. y Canadá, que en gran medida no conocen los países de la OPEP, también deberían ganar cuota de mercado.
En la OPEP+, Arabia Saudita podría acabar haciendo los mayores sacrificios para preservar la unidad. La unanimidad del cártel aún no se ha puesto a prueba de verdad. La OPEP+ requerirá recortes adicionales en 2023 si persiste la tendencia a la baja de los precios del petróleo. En ese caso, el grupo se vería sometido a fuertes tensiones.