El mercado hipotecario israelí ha comenzado a mostrar señales de revitalización, a pesar de las incertidumbres actuales, según informan expertos del sector bancario.
Opiniones del sector: el escenario hipotecario
A pesar de la ausencia de una marcada tendencia al alquiler a largo plazo en Israel, Uri Yonissi, director de la división hipotecaria de Bank Leumi, se muestra optimista. Enfatiza la relevancia del momento para la adquisición de propiedades debido a la partida de los inversores del sector hipotecario, que ahora se inclinan por inversiones bancarias menos riesgosas.
Yonissi también minimizó las preocupaciones sobre una posible caída de los precios de la vivienda. Considera que el mercado inmobiliario israelí se encuentra cerca de un nuevo auge.
Dror Feldman, director del Sector Hipotecario del Banco Mizrahi Tefahot, coincide en que la incertidumbre en torno a las tasas de interés ha despejado. Sin embargo, Feldman insinúa que el panorama podría no ser tan esperanzador debido a la disminución de la construcción de viviendas.
Desafíos en el horizonte: el panorama de la construcción
Los especialistas ven la reducción en la construcción de viviendas y el incremento en la formación de grupos de compradores como respuesta a los altos costos de financiación. Estos cambios podrían contribuir a un aumento en los precios de la vivienda a largo plazo.
Yonissi señala que los precios han bajado ligeramente en el centro de Tel Aviv, pero en las áreas periféricas, los precios no han sufrido cambios significativos.
Asimismo, Yonissi advierte sobre una disminución en la tasa de inicio de construcciones, lo cual puede tener un impacto notable en los próximos años. También destaca un déficit de 203.000 viviendas, lo que puede implicar un incremento constante en la demanda.
Condiciones macroeconómicas: tasas de interés e inflación
Feldman predice que la actual tasa de interés alta perdurará durante al menos otro año y medio. También advierte que la inflación podría no haber alcanzado su pico aún, ya que se siguen observando aumentos en los alquileres, una componente significativa del Índice de Precios al Consumo.