Shell ha tomado la decisión de detener de forma indefinida sus operaciones de envío a través de la ruta marítima que conecta el mar Rojo con el canal de Suez.
Esta medida surge como respuesta a la intensificación de las tensiones regionales y el creciente riesgo de ataques por parte de los hutíes a embarcaciones comerciales. Esta información fue revelada el martes por The Wall Street Journal, que se apoyó en fuentes cercanas a la decisión de la reconocida compañía petrolera.
Un incidente significativo ocurrió en diciembre, cuando un petrolero contratado por Shell para transportar combustible de aviación desde la India fue atacado por un dron y hostigado por embarcaciones hutíes respaldadas por Irán, según declaraciones de oficiales de la compañía naviera al Journal.
Con esta acción, Shell se suma a la lista de grandes corporaciones que han suspendido el tránsito de petroleros por esta área estratégica. Entre ellas se encuentra BP, una compañía petrolera de gran envergadura con sede en el Reino Unido, que en diciembre también suspendió temporalmente sus envíos por esta ruta debido al agravamiento de la situación de seguridad en el mar Rojo.
El mar Rojo se ha transformado en un foco de ataques contra embarcaciones, principalmente por parte de los rebeldes hutíes de Yemen, quienes mantienen alineación con Irán.
Esta situación se agrava en el contexto de crecientes tensiones en Oriente Medio y los recientes ataques de Estados Unidos y el Reino Unido contra objetivos hutíes en Yemen. Como consecuencia, las principales asociaciones de la industria naviera y de petroleros han recomendado a sus miembros evitar el estrecho de Bab el-Mandeb. Además, los cargadores han comenzado a redirigir sus rutas, evitando el tránsito por el mar Rojo.
Las tensiones se intensificaron desde el viernes, alcanzando un punto crítico el domingo cuando un misil de crucero antibuque fue lanzado desde territorio hutí en Yemen contra el USS Laboon, un buque operativo en el sur del mar Rojo. El misil fue interceptado cerca de la costa de Hudaydah por aviones de combate estadounidenses, sin que se registraran heridos ni daños, de acuerdo con el Mando Central de Estados Unidos.
El lunes, los hutíes atacaron con un misil a un buque mercante estadounidense, el Gibraltar Eagle, un portacontenedores con bandera de las Islas Marshall y operado por Estados Unidos. Según el Mando Central de Estados Unidos, el ataque no causó heridos ni daños significativos, y el buque continúa su ruta.
Los hutíes de Yemen han advertido que atacarán a todos los buques estadounidenses que transiten por el mar Rojo, en respuesta a los recientes ataques con misiles realizados por fuerzas estadounidenses y británicas contra sus objetivos en Yemen. Esta declaración marca un nuevo nivel de hostilidad en la región, aumentando significativamente el riesgo para la navegación comercial en una de las rutas marítimas más críticas del mundo.Principio del formulario