El paisaje de Gaza ha sido gravemente afectado tras un año de intensos combates, que han dejado numerosos barrios y ciudades destruidas. En Jabaliya, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han estado combatiendo durante el último mes, en un intento por eliminar a hasta 2.000 terroristas ocultos entre 70.000 civiles.
Jabalya es una zona urbana densamente poblada, caracterizada por edificios de varios pisos que se alzan sobre calles serpenteantes en colinas bajas. Está conectada a otros barrios como Beit Lahiya, Beit Janún y la ciudad de Gaza.
La guerra ha devastado estas áreas. Grandes estructuras están en ruinas, con pisos colapsados, ventanas rotas, puertas arrancadas y paredes derrumbadas. Parte de estos daños se atribuyen a que Hamás ha utilizado áreas civiles para esconder túneles y lanzar cohetes, además de fabricar explosivos improvisados en edificios.
Hamás coloca trampas explosivas en edificios y carreteras, dispara cohetes y luego se retira. Los soldados han informado que Hamás ha dejado fusiles AK-47 y municiones en edificios registrados, permitiendo a los terroristas estar siempre cerca de las armas, pero caminar desarmados para mezclarse con la población civil.
Desafíos de Israel frente a la narrativa de destrucción en Gaza
Desarraigar a Hamás ha resultado extremadamente complejo. Sin embargo, muchos miembros de la comunidad internacional que han visitado Gaza, o que lo harán en el futuro, probablemente culparán a Israel por los niveles de destrucción observados. La ONU y otras ONG que trabajan en Gaza raramente culpan directamente a Hamás, refiriéndose a ellos como un “grupo armado”.
Aunque se han presentado pruebas de túneles bajo instalaciones de la UNRWA y sobre el uso de hospitales y escuelas como refugios, Hamás no recibe condena por parte de estas organizaciones. Esto plantea la pregunta: ¿cómo puede Israel enfrentar la narrativa que se está construyendo sobre la destrucción en Gaza y la inevitable reconstrucción?
“Como en todo este conflicto, se confunde el efecto con la intención”, explica Andrew Fox, exoficial del ejército británico. Fox destaca que los procesos de selección de objetivos de las FDI coinciden con los de otros ejércitos occidentales, y que han tomado medidas sin precedentes para minimizar las bajas civiles.
Fox señala que es fundamental que Israel se adelante a esta narrativa mostrando al mundo sus mecanismos operativos. “Deben exhibir los paquetes de objetivos, la red de túneles y hasta qué punto la infraestructura de Hamás ha exigido esta destrucción”, concluye Fox.
A pesar de todo esto, Fox prevé que cuando los daños sean completamente revelados al mundo, Israel será condenado.
Israel debe mostrar la reconstrucción tras la destrucción en Gaza
“Es imprescindible que Israel le muestre al mundo primero lo ocurrido y luego cómo se reconstruirá”, señaló Andrew Fox, subrayando que “los inocentes en Gaza han sufrido profundamente y merecen respuestas. Si fuera un alto funcionario israelí, explicaría también cómo será la reconstrucción”.
Fox comprende claramente las consecuencias de lo que está por venir. Aunque algunos con posturas antiisraelíes no cambiarán su opinión, muchas personas que simpatizan con Israel o son neutrales querrán saber la verdad detrás de las imágenes de ciudades destruidas. ¿Serán informadas de que Hamás llenó esas áreas con armas y túneles?
La batalla en Mosul contra ISIS viene a la mente en este contexto. Aunque la parte oriental de Mosul no sufrió tanta destrucción, la lucha en la ciudad vieja en la orilla occidental del Tigris fue devastadora. El ejército iraquí luchó edificio por edificio, y el ISIS incluso destruyó la histórica mezquita Nuri.
Cuando Mosul fue liberada, algunos criticaron la coalición liderada por Estados Unidos por la devastación. Sin embargo, la realidad es que el ISIS fue derrotado y hoy en día Mosul está en gran parte reconstruida. Esto es un ejemplo de cómo la guerra, aunque destructiva, también puede llevar al renacimiento.
La devastación de Gaza supera incluso a la de Mosul
La destrucción en Gaza, sin embargo, es aún mayor que en Mosul. Después de haber visto ambas ciudades en medio de la guerra, puedo afirmar que esta es la realidad. Jan Egeland, secretario general del Consejo Noruego para los Refugiados, compartió recientemente imágenes de Gaza y comentó: “La destrucción desafía toda creencia, desde Rafah hasta la ciudad de Gaza”.
Asimismo, Arwa Damon, ex corresponsal de CNN, también mostró imágenes del estado de Gaza y afirmó que “nadie está acostumbrado a estas escenas apocalípticas”. Actualmente, Damon está en su cuarta misión humanitaria en Gaza con su organización INARA, ayudando a niños heridos por la guerra.
Philippa Greer, abogada de derechos humanos de la UNRWA, publicó un vídeo de la destrucción el 9 de noviembre, describiendo la entrada a la ciudad de Gaza como “ruinas de la vida”. En un desgarrador comentario, relató haber visto un burro muerto atado a un carro con pertenencias personales.
La magnitud de la destrucción es evidente. La cuestión central es cómo Hamás condujo a Gaza a esta devastación al utilizar zonas civiles para ocultar armas. Israel tendrá que esforzarse para compartir esta narrativa en los próximos meses y mostrar cómo Hamás explotó a los civiles.