Amnistía Internacional pidió un embargo internacional de armas a Israel por la respuesta del ejército israelí a la violencia islamista semanal en la frontera con la Franja de Gaza.
En una declaración el viernes, Amnistía Internacional acusó a Israel de llevar a cabo un “asalto asesino” contra palestinos que participaron en las violentas protestas de la “Marcha del Retorno”, donde los participantes quemaron neumáticos, arrojaron piedras y bombas incendiarias contra las tropas israelíes, volaron cometas con símbolos nazis en llamas sobre el borde, e intentaron de destruir la cerca de la frontera.
“La comunidad internacional debe actuar de manera concreta y detener la entrega de armas y equipos militares a Israel”, dijo Magdalena Mughrabi, directora regional adjunta de Amnistía para Medio Oriente y África del Norte.
“No hacerlo continuará alimentando los graves abusos contra los derechos humanos contra miles de hombres, mujeres y niños que sufren las consecuencias de la vida bajo el cruel bloqueo israelí de Gaza”, agregó.
Mughrabi también pidió que la Corte Penal Internacional abra una investigación de “crímenes de guerra” si Israel no persigue “enjuiciamientos criminales de los responsables”.
Israel ha defendido su manejo de los enfrentamientos, diciendo que los soldados disparan de acuerdo con las regulaciones del ejército para proteger la infraestructura de seguridad y a los ciudadanos israelíes. El ejército dice que Hamás, el grupo terrorista que gobierna Gaza y busca destruir Israel, usa las protestas como una forma de ocultar el terrorismo.