En una operación conjunta de ayuda humanitaria, aviones estadounidenses y jordanos distribuyeron el sábado suministros alimentarios a civiles palestinos confinados en la Franja de Gaza, según un comunicado del Mando Central estadounidense.
La operación incluyó lanzamientos aéreos desde un avión C-130 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos y un avión C-130 de la Real Fuerza Aérea de Jordania, en un momento en que la principal agencia de la ONU en el enclave advirtió de una grave desnutrición en uno de cada tres niños menores de dos años y de una posible hambruna.
El Mando Central de Estados Unidos describió estos lanzamientos aéreos como «parte de un esfuerzo sostenido» y anunció que se están planeando más entregas.
La situación en Gaza es crítica, con gran parte del territorio devastado y sus 2,3 millones de residentes sufriendo una grave escasez de alimentos, más de cinco meses después de que Israel lanzara una ofensiva aérea y terrestre. Esta acción fue una respuesta a la masacre del 7 de octubre perpetrada por los terroristas de Hamás, que controlan el enclave.
Estados Unidos, uno de los principales aliados de Israel, junto con otros países, ha instado a Israel a facilitar la entrada de más ayuda humanitaria. Por su parte, Israel ha señalado a las agencias de la ONU por el retraso en las entregas, argumentando que no impone restricciones a la asistencia.
Desde el 2 de marzo, Estados Unidos ha comenzado a enviar ayuda mediante lanzamientos aéreos y tiene previsto iniciar un transporte marítimo desde la isla de Chipre, con el que pretende paliar la grave crisis humanitaria que sufre la Franja de Gaza.