El enviado de EE. UU. a Oriente Medio, Brett McGurk, se encuentra en El Cairo para mantener conversaciones “activas” sobre la liberación de los rehenes en poder de Hamás en Gaza y sobre una pausa humanitaria, según informa la Casa Blanca.
El portavoz de la Casa Blanca, John Kirby, afirma que la administración Biden apoyaría absolutamente una pausa humanitaria más larga. Se niega a especificar un marco temporal y advierte que no calificaría las conversaciones de negociaciones.
“Las conversaciones son muy sobrias y serias sobre el intento de conseguir otro acuerdo sobre los rehenes”, declaró Kirby en una sesión informativa regular de la Casa Blanca, añadiendo que las conversaciones incluían el debate sobre cuánto tiempo sería necesario para sacar a los rehenes.
McGurk también trató otros temas, como la evaluación de las operaciones militares israelíes y sus esfuerzos para proteger a los civiles, así como la posibilidad de normalizar los lazos entre Israel y Arabia Saudí.
Kirby reiteró la insistencia de Washington en que la futura dirección de Gaza tras el conflicto no podía incluir a dirigentes de Hamás, y afirmó que Washington no quería que se redujera el territorio de Gaza.
“Sea cual sea el aspecto que tenga la gobernanza en Gaza, una vez que esto haya terminado, tiene que ser representativa de las aspiraciones del pueblo palestino, que no está representado por Hamás”, afirmó.