El Ministerio de Defensa de Israel confirmó el domingo por la mañana que el cruce de Erez, en la frontera norte de la Franja de Gaza se cerró en respuesta a la violencia islamista del viernes.
La decisión fue tomada por el ministro de Defensa, Avigdor Liberman, después de una evaluación de la situación el sábado por la noche.
No se mencionó cuánto duraría el cierre.
La movida fue reportada por primera vez por fuentes de medios palestinos en Gaza y en Judea y Samaria, quienes dijeron que Israel le dijo al grupo terrorista Hamás que controla la Franja de Gaza que cerraría el cruce fronterizo el domingo por la mañana.
El paso fronterizo, que actúa como el único cruce peatonal entre la Franja de Gaza e Israel, aún estará abierto para emergencias médicas que requieran la transferencia de residentes de Gaza a hospitales israelíes, de acuerdo con los informes de los medios palestinos.
La mayoría de los peatones que pasan por el cruce están buscando tratamiento médico.
El viernes, miles de habitantes de Gaza se concentraron a largo de la frontera con Israel, cerca del cruce de Erez, en manifestaciones islamistas semanales respaldadas por el grupo terrorista Hamás. Los líderes de Hamás habían urgido al público a participar en la violencia del viernes.
Los islamistas lanzaron piedras, bombas improvisadas y cócteles Molotov a los soldados y quemaron neumáticos para crear una cortina de humo. Otros lanzaron globos incendiarios hacia Israel.
El ministerio de salud dirigido por Hamás en Gaza informó que dos hombres habían muerto y unos 250 heridos, de los cuales al menos 25 fueron alcanzados por fuego real.
El cierre del cruce de Erez se produce cuando los altos cargos de Hamás dicen que las negociaciones para un acuerdo de alto el fuego a largo plazo se encuentran en “el tramo final”.
La semana pasada, el canal de televisión Al-Mayadeen, con sede en el Líbano, informó que el acuerdo a largo plazo que tomará forma durará un año y verá el establecimiento de una conexión de transporte de carga entre Gaza y Chipre. Israel tendrá control de seguridad sobre el tráfico marítimo entre el enclave costero palestino y Chipre, según el informe, que cita fuentes familiarizadas con los detalles.