Los ministros del partido Sionismo Religioso votaron a favor del acuerdo para la liberación de rehenes después de intensas discusiones en el gobierno israelí y consultas internas previas a la votación.
Los miembros del partido afirmaron que el acuerdo es un logro en línea con los objetivos de la guerra, promoviendo estos fines sin perjudicarlos. Consideran que el acuerdo, obtenido bajo presión sobre Hamás y su líder Yahya Sinwar, facilitará la liberación de muchas mujeres y niños.
Destacaron que el acuerdo es una medida temporal con mecanismos operativos claros, que no implicará un desgaste prolongado y permitirá la reanudación inmediata de la guerra con determinación, hasta destruir a Hamás y eliminar la amenaza de Gaza.
El partido resaltó la unánime claridad de objetivos de guerra entre todos los ministros del gobierno, incluyendo los organismos de seguridad, garantizando resistencia a presiones y unidad en la lucha.
El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, líder del partido, explicó que, aunque inicialmente tenían una postura opuesta, las discusiones los convencieron de que la devolución de los rehenes avanzaría los objetivos de guerra. Aseguró el compromiso incondicional del gobierno y las FDI en continuar la lucha hasta la destrucción de Hamás, y destacó la preparación de las FDI para proteger a sus fuerzas y aprovechar la pausa operativa.
Smotrich calificó el acuerdo como positivo y lo respaldó, esperando que contribuya al espíritu y moral nacional, y al apoyo a la continuación de la guerra hasta alcanzar los objetivos generales.
Finalmente, hizo un llamamiento a los soldados y comandantes, expresando apoyo y confianza en que completarán la misión, destruirán a Hamás y otras organizaciones terroristas, desmovilizarán Gaza y devolverán la seguridad y el honor a los ciudadanos de Israel.