El gabinete aprobó el domingo el nombramiento de Gil Limon, asesor principal del fiscal general Avichai Mandelblit, como fiscal general adjunto.
No hubo oposición entre los ministros al nombramiento, que también requiere la firma del ministro de Justicia, Gideon Sa’ar.
Un panel de la Comisión de la Función Pública había recomendado por unanimidad a Limón para el puesto, cediendo el nombramiento a Sa’ar.
Limón sustituirá a la anterior fiscal general adjunta de Derecho Administrativo Público, Dina Zilber. El fiscal general cuenta con siete adjuntos, cada uno de ellos con una especialidad jurídica concreta. Como fiscal general adjunto, una parte fundamental de la función de Limon será evaluar los conflictos de intereses de los funcionarios del gobierno.
Mandelblit encabezó el panel que nombró a Limon y, a pesar de su conexión personal con su ayudante, no presentó una opinión jurídica que explicara por qué no constituía un conflicto de intereses, según el diario Haaretz, que describió a los dos hombres como amigos íntimos.
Limon, de 44 años, es doctor en Derecho por la Universidad Hebrea de Jerusalén y asesora a Mandelblit desde 2016. Los dos también trabajaron anteriormente juntos en la fiscalía militar. También ha sido asesor jurídico de la misión de Israel en la ONU y del secretario del gabinete, según el Ministerio de Justicia.