El presidente de la Knesset, Benny Gantz, advirtió al primer ministro Benjamin Netanyahu el lunes que si no hacía concesiones que llevaran a la firma de un acuerdo para el lunes por la tarde, permitiría el avance de la legislación anti-Netanyahu, informó KAN.
La legislación incluye proyectos de ley que limitarían a un primer ministro a un período en el cargo e impedirían que un MK acusado formara gobierno.
Funcionarios de Kajol-Lavan informaron el lunes que se han hecho progresos en las negociaciones con el Likud sobre una nueva coalición de gobierno y que un acuerdo podría ser firmado tan pronto como el lunes.
Después de otra ronda de negociaciones que acercaron a las partes, una opción que se está considerando es firmar un acuerdo, aunque no se haya completado y dejar los desacuerdos restantes para ser resueltos más tarde.
Esos desacuerdos se mantienen sobre quién será el portavoz de la Knesset, el ministro de salud y en el comité que selecciona a los jueces. También sigue habiendo una lucha sobre cómo y cuándo implementar el plan de paz del presidente de EE.UU. Donald Trump para Oriente Medio.
“Veremos hoy si estamos en camino de un acuerdo o de una ruptura”, dijo un funcionario de Kajol-Lavan.
El MK Chili Tropper de Kajol-Lavan, que es cercano a Gantz, dijo que su partido no comprometerá la autoridad del ministro de justicia, que se espera que sea el presidente de la facción Kajol-Lavan, Avi Nissenkorn. Los funcionarios de Kajol-Lavan reiteraron que tampoco cederán ante el hecho de que el ex presidente de la Knesset, Yuli Edelstein, no regrese a su puesto.
El líder de la Yamina, Naftali Bennett, dijo a la Radio del Ejército el lunes por la mañana que no había garantías de que se uniera al gobierno y que eso dependería de lo que le ofreciera a su partido el Primer Ministro Benjamin Netanyahu.
“Miraremos al gobierno y veremos sus políticas”, dijo. “Si lo vemos como un autobús que va en sentido contrario, no subiremos al autobús. La pelota está en su campo”.