El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, afirmó ayer que el objetivo de Israel es “actuar en todos lados, todos los días para prevenir el fortalecimiento de nuestras fuerzas enemigas,” tras un ataque en Damasco que resultó en la muerte de siete funcionarios del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, incluido el comandante principal en Siria. Este comentario surge en el contexto de un enfrentamiento continuo, que Israel describe como una guerra en múltiples frentes, tanto ofensiva como defensiva.
En una reunión del Comité de Asuntos Exteriores y Defensa del Knesset, Gallant detalló la estrategia de Israel enfocada en transmitir un mensaje claro a cualquier entidad que actúe en contra de sus intereses en Medio Oriente: “el precio por actuar contra Israel será un precio elevado”. Esta declaración subraya la determinación de Israel de salvaguardar su seguridad frente a las amenazas regionales, manteniendo un enfoque proactivo para prevenir la acumulación de fuerzas hostiles en sus fronteras.