El ministro de Defensa, Benny Gantz, anunció el lunes que Israel planea legalizar a miles de extranjeros indocumentados casados con palestinos, como parte de una estrategia general israelí para fortalecer a la Autoridad Palestina.
Los cónyuges palestinos han residido ilegalmente en Cisjordania durante años con pocos recursos legales para obtener permisos para vivir con sus familias. Los tribunales israelíes han dictaminado que la unificación familiar en Cisjordania no es un derecho garantizado por el derecho internacional.
Según Gantz, algunos gazatíes que se han trasladado a Cisjordania pero conservan pases caducados que los identifican como residentes del enclave también verán actualizado su estatus. Las autorizaciones solo se aplicarán a los adultos y dependerán de que se completen con éxito los procedimientos de seguridad habituales.
Unos 5.000 cónyuges palestinos serán legalizados por ahora, según tuiteó el Ministro de Asuntos Civiles de la Autoridad Palestina, Hussein al-Sheikh.
Los cónyuges serán “una primera tanda en el camino hacia la resolución total de esta cuestión, en el marco de un calendario acordado”, dijo al-Sheikh, un estrecho confidente del presidente de la AP, Mahmoud Abbas.
Además de la promesa de reconocimiento, Gantz anunció el lunes otras medidas: un préstamo previsto de 500 millones de NIS para Ramallah, más permisos de construcción en Cisjordania, donde Israel administra la construcción, y más permisos de trabajo para los palestinos que buscan empleo en Israel.
El anuncio de Gantz se produjo tras una reunión que mantuvo la noche anterior con Abbas, el primer encuentro público de este tipo entre funcionarios israelíes y palestinos de alto nivel en más de una década. En una reunión informativa celebrada el lunes, Gantz pidió que se reforzara la AP como baluarte contra Hamás y otros grupos terroristas.