El ministro de Asuntos Exteriores, Israel Katz, pide la dimisión del director de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), tras el descubrimiento por Israel de un túnel de Hamás y un centro de datos de alto secreto justo debajo de la sede evacuada de la agencia en la ciudad de Gaza.
Israel Katz rechaza la afirmación del comisionado general de la UNRWA, Philippe Lazzarini, de que desconocía su presencia, por considerarla “no solo absurda, sino también una afrenta al sentido común”.
“Su pronta dimisión es imperativa”, escribe en X, antes Twitter.
“La exposición de la profunda implicación de la sede de la UNRWA en Gaza con Hamás, incluyendo su uso para actividades terroristas y como punto de acceso a túneles terroristas, requiere una acción inmediata”, dice Katz.
Las FDI y la agencia de seguridad Shin Bet dijeron que las operaciones en la ciudad de Gaza en las últimas semanas habían llevado al descubrimiento de un “pozo de túnel” cerca de una escuela dirigida por la agencia de la ONU.
“El pozo conducía a un túnel terrorista subterráneo que servía como un importante activo de la inteligencia militar de Hamás y pasaba por debajo del edificio que sirve como sede principal de la UNRWA en la Franja de Gaza”, añadieron en un comunicado.
La “infraestructura eléctrica” del túnel -de 700 metros de largo y 18 metros bajo tierra- “conectaba” con la sede de la agencia, “lo que indica que las instalaciones de la UNRWA suministraban electricidad al túnel”, señalaron.
Documentos y un alijo de armas en el propio complejo de la ONU “confirmaron que las oficinas también habían sido utilizadas por terroristas de Hamás”, según la declaración conjunta.