El primer ministro Benjamin Netanyahu aceptó una invitación de la nueva directora de la UNESCO Audrey Azoulay para participar en una conferencia en Nueva York el mes próximo sobre la lucha contra el antisemitismo, según un informe publicado el martes.
La conferencia, que se celebrará como parte de la reunión de la Asamblea General de septiembre, será la primera de su tipo y se espera que albergue a líderes como la canciller alemana Angela Merkel, el presidente francés Emmanuel Macron y el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.
Su oradora principal será la Prof. Dina Porat, historiadora jefa del museo conmemorativo del Holocausto Yad Vashem en Jerusalén, informó el sitio de noticias Ynet de Israel.
La conferencia también verá el lanzamiento de un nuevo programa educativo de la ONU para combatir el antisemitismo.
La invitación de Azoulay parece representar un intento de su parte de mejorar los lazos entre la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura y el Estado judío.
Israel y Estados Unidos anunciaron a principios de año que abandonarían el grupo para fines de 2018, citando, entre otras razones, el sesgo anti-Israel del organismo.
El enviado de Israel ante la ONU, Danny Danon, agradeció el compromiso de los líderes mundiales con la lucha contra el antisemitismo y pidió «pasos adicionales» para erradicar el odio.
Netanyahu elogió a Azoulay por el hecho de que no se aprobaron resoluciones contra Israel en la UNESCO durante casi un año, según un informe del Canal 10 a principios de este mes.
Según los informes, Azoulay le dijo al primer ministro que estaba haciendo grandes esfuerzos para cambiar el trato de la UNESCO hacia Israel, y agregó que le gustaría reunirse con él al margen de la sesión de la ONU para discutir una posible postergación de la salida de Israel de la agencia.
A principios de este mes, un alto diplomático israelí dijo que Jerusalén está considerando si se llevará a cabo la salida u otras opciones. Una posibilidad es que Israel no cancelará el retiro, sino que lo demorará varios meses para verificar los cambios en la organización.
La UNESCO es mejor conocida por su programa de Patrimonio Mundial para proteger sitios y tradiciones culturales, pero también trabaja para combatir el extremismo violento, mejorar la educación de las niñas, promover el entendimiento del Holocausto, defender las libertades de los medios y alentar la ciencia sobre el cambio climático.
En los últimos años, sin embargo, Israel se ha enfurecido por las resoluciones que ignoran y disminuyen su conexión histórica con Tierra Santa, y que han nombrado a los antiguos sitios judíos como sitios de “herencia palestina”.