Netanyahu hizo la declaración el miércoles mientras recorría el norte con el ministro de Defensa, Yoav Gallant, reiterando la política israelí sobre cualquier intento iraní de establecer emplazamientos militares en las fronteras de Israel con Líbano y Siria.
Netanyahu ha afirmado que la dictadura iraní y sus apoderados en Siria y Líbano son la mayor amenaza para Israel.
“Nos opondremos enérgicamente a cualquier esfuerzo iraní por adquirir o desarrollar armas nucleares, así como a cualquier esfuerzo por establecer una presencia militar en nuestra frontera militar septentrional en Siria”.
“No toleraremos ninguna acción hostil emprendida desde el Líbano por Hezbolá”.
“Y reiteraremos las líneas rojas de nuestra posición a quienes sea necesario”, dijo Netanyahu.
Dado que la paz es un “objetivo vital”, Gallant se ha comprometido a impedir que Irán envíe armas a Hezbolá. Estos dos también visitaron el comando norte.
La visita de Netanyahu al norte se produce tras el discurso que pronunció la víspera ante el Comité Estadounidense-Israelí de Asuntos Públicos (AIPAC), en el que advirtió de los peligros que entraña la búsqueda por Irán de un arsenal nuclear y subrayó la necesidad de un frente unido entre Jerusalén y Washington contra la República Islámica.
Desde que fue investido presidente hace dos semanas, ha hablado de Irán casi todos los días.
El ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, se encuentra actualmente en Estados Unidos, donde se ha reunido con funcionarios de la administración Biden, y está previsto que el consejero de Seguridad Nacional estadounidense, Jake Sullivan, visite Israel este mes para proseguir las conversaciones sobre Irán.