El líder de la oposición y presidente del Likud, Benjamin Netanyahu, ha inaugurado esta tarde (lunes) la primera reunión de la facción del Likud en la sesión de invierno.
“Los ciudadanos israelíes ven lo malo que es este gobierno. La (coalición) cree que está a salvo, pero sabemos que el mundo es redondo. Ya estuvimos en la oposición con 12 escaños y volvimos con fuerza, así que también ocurrirá esta vez”, dijo Netanyahu.
Y añadió: “Sucederá por sus fallos, por las omisiones, por las malas mezclas. Mantendremos nuestra determinación y mantendremos nuestras líneas cohesionadas”.
Netanyahu también se refirió a las leyes de inmigración que se discutirán en la Knesset esta semana. “El miércoles habrá una prueba para el gobierno. Presentamos una ley de inmigración modificada, renovada y sofisticada. Algo que será bueno para todos los ciudadanos israelíes. Pido una movilización total para apoyarla”.
En la parte cerrada de la reunión, el presidente del Likud añadió: “El gobierno está fracasando en la aprobación de docenas de leyes que pretende aprobar debido a los filibusteros. Pretendemos agravar la situación. No les demos ni un minuto de respiro”.