El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha sostenido una reunión de seguridad en la sede de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en Tel Aviv, junto con ministros de alto rango y jefes de defensa, en un momento en que las tensiones con Líbano continúan escalando.
Según un reporte del Canal 12, aunque Israel se encuentra preparándose para un posible conflicto con Hezbolá con el fin de permitir el regreso de los residentes del norte a sus hogares, aún se mantiene la esperanza de evitar una guerra a gran escala.
El informe, basado en declaraciones de altos funcionarios, señala que Israel confía en que las recientes demostraciones de fuerza puedan persuadir a Hezbolá de aceptar una solución diplomática para resolver la crisis. No obstante, un alto funcionario advirtió que “los israelíes deben estar listos para días dramáticos en el norte”.
Desde el 8 de octubre, Hezbolá y sus aliados han lanzado ataques casi diarios contra comunidades israelíes y puestos militares a lo largo de la frontera, justificando estas acciones como apoyo a Gaza en la guerra que se desarrolla allí.
Hasta la fecha, estos enfrentamientos han causado la muerte de 26 civiles israelíes, así como de 22 soldados y reservistas de las FDI. Además, ha habido varios ataques desde Siria, aunque sin víctimas reportadas.
Por otro lado, Hezbolá ha confirmado la muerte de 478 de sus miembros durante los combates, la mayoría en Líbano y algunos en Siria. También han muerto 79 miembros de otros grupos terroristas, un soldado libanés y decenas de civiles.