Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han implementado sofisticadas tecnologías en sus operaciones Escudo Defensivo y Flecha, utilizando bombas estadounidenses programadas para penetrar con precisión en edificios y eliminar a altos mandos.
Bombas de Precisión Estadounidenses
Estas bombas, conocidas como SDB (Small Diameter Bomb), tienen un peso total de 125 kg y fueron adquiridas de los Estados Unidos. En la Fuerza Aérea Israelí, estas bombas son apodadas “Bard-Had” y pueden ser lanzadas por tres tipos de aviones de combate: F-15, F-16 y F-35.
Lo que distingue a estas bombas es su tamaño reducido y su precisión. Pueden ser lanzadas desde una distancia de más de 100 km, manteniendo el principio de sorpresa para el enemigo, que no necesariamente puede escuchar o ver el avión de combate.
Cada bomba contiene 16 kg de explosivos, permitiendo a cada avión de combate llevar una gran cantidad de bombas de este tipo.
Tecnología GPS Avanzada
Los sistemas de navegación de estas bombas son extremadamente avanzados y permiten la identificación automática del objetivo, seguida por el bloqueo asistido por GPS, lo que permite una precisión excepcional en el ataque.
Según las FDI, esta precisión no solo permite golpear el objetivo con precisión, sino que también minimiza el daño ambiental, un factor muy importante para la legitimidad internacional de estas operaciones.
Estas bombas han sido utilizadas en la operación Escudo Defensivo y Flecha, confirmando su eficacia en la eliminación de altos mandos.
El papel de la Fuerza Aérea Israelí
La Fuerza Aérea Israelí ha desempeñado un papel clave en la programación de estas bombas para penetrar con precisión en los edificios. Según una fuente militar, “los genios de la Fuerza Aérea saben cómo hacer que la bomba entre por la ventana del edificio”.
Este logro es el resultado de un alto nivel de planificación que toma en cuenta variables como la temperatura, el alcance, el viento y la altura.
Este nivel de planificación y precisión pone a las FDI entre las fuerzas militares más avanzadas del mundo en términos de capacidad de ataque quirúrgico.