Un avión C-130 de la Real Fuerza Aérea de Marruecos aterrizó el domingo en la base aérea de Hatzor, en el sur de Israel, lo que supone la primera vez que una plataforma de la fuerza aérea del país norteafricano aterriza en el Estado judío.
El avión voló a Israel antes de un simulacro internacional que tendrá lugar en el sur del país con Estados Unidos esta semana.
El avión fue avistado por seguidores de la aviación el domingo por la mañana.
Aunque las FDI no quisieron comentar sobre “colaboraciones con un país específico”, los militares dijeron a The Jerusalem Post que “las FDI cooperan con una variedad de países y ejércitos extranjeros, y realizan ejercicios, reuniones de alto nivel, investigaciones conjuntas y más”.
Las FDI participan en varios simulacros internacionales cada año con el fin de prepararse para una amplia gama de escenarios y fortalecer los lazos profesionales y el conocimiento operativo. La IAF participó en dos simulacros internacionales en junio, incluyendo el despliegue de F-35 en bases en el extranjero para el Falcon Strike a gran escala en Italia.
Mientras tanto, Marruecos acaba de concluir el 17º simulacro anual a gran escala León Africano, en el que participaron Estados Unidos, Brasil, Canadá, Gran Bretaña, Italia, Países Bajos, Senegal y Túnez. Además, estuvieron presentes observadores militares de 30 países.
Según la prensa local, 7.000 personas participaron y se entrenaron para responder al terrorismo, a los ataques químicos y a la ciberguerra durante el principal ejercicio anual conjunto del Mando de Estados Unidos en África. Un comunicado del USACOM decía que el “León Africano 2021 es un ejercicio multidominio, multicomponente y multinacional, que empleará toda una serie de capacidades de misión con el objetivo de reforzar la interoperabilidad entre las naciones asociadas y mejorar la capacidad de operar en el teatro de operaciones africano”.
Israel y Marruecos mantienen desde hace años estrechos vínculos económicos, diplomáticos y militares, y en diciembre ambos países firmaron un acuerdo de normalización. Según un informe de Haaretz, los lazos militares entre Israel y Marruecos implican principalmente la cooperación en materia de inteligencia y el comercio de armas.
En enero del año pasado, el ejército marroquí recibió tres aviones no tripulados de reconocimiento israelíes en un acuerdo por valor de unos 48 millones de dólares. El acuerdo entre ambos países se firmó en 2014 y se cerró a través de la empresa francesa Dassault.
Francia ha estado operando el Heron bajo el nombre de Harfang y, según informes de 2014, los drones adquiridos por Marruecos fueron retirados por la Fuerza Aérea francesa después de varios años de servicio en Afganistán. Según el informe de Intelligence Online, los drones se desplegarán para contrarrestar a los grupos extremistas y luchar contra los movimientos rebeldes en el Sáhara Occidental.
Los drones, que pueden permanecer en el aire durante más de 50 horas, habrían sido equipados con un dispositivo para llevar tres cámaras de vigilancia, un sistema de grabación de vídeo, un sistema de comunicación aire-tierra, así como sistemas electro-ópticos para la visión diurna y nocturna.
Según otro informe, Israel vendió a Marruecos otros sistemas militares, incluidos sistemas de control y comunicaciones militares (como sistemas de radar para aviones de combate) a través de un tercero.