La continua «guerra entre guerras» de las FDI y el fortalecimiento de los ejércitos pertenecientes a los vecinos de Israel han provocado que el ejército le solicite al gobierno 10 mil millones de NIS adicionales para estar preparados para la guerra, informó la Radio del Ejército.
Según una fuente militar citada por la Radio del Ejército, los costos inesperados de las guerras entre guerras de las FDI hicieron que cientos de millones de dólares fueran sacados del presupuesto de otras divisiones en el ejército.
La «guerra entre guerras» de las FDI es un código para una constelación de operaciones encubiertas que continúan por debajo del radar contra los enemigos de Israel. Se cree que el costo de las operaciones en curso ha costado varios millones de shekels en el último año.
Israel se ha abstenido hasta hace poco de comentar sobre actividades militares más allá de sus fronteras, creyendo que al no confirmar ni negar los ataques, es menos probable que Irán tome represalias. Pero en los últimos meses, los funcionarios han comenzado a discutir huelgas en Siria.
Si Irán continúa atrincherándose en todo el Medio Oriente, Israel podría tener que considerar la posibilidad de expandir su campaña de guerra entre guerras durante el próximo año para evitar cualquier daño al Estado judío. Se cree que Irán intentará atrincherarse en Irak, un país de mayoría musulmán chií, como lo hizo en Siria, donde lograron establecer, configurar y consolidar una sólida estructura de seguridad paralela en el país.
A Israel le gusta estar un paso por delante de sus enemigos y, según la Radio del Ejército, otra razón detrás de la demanda de fondos adicionales son las compras y el fortalecimiento de los países vecinos y el movimiento de armamento iraní y ruso a países como Irak y Siria.
Rusia ya se ha reafirmado como la principal superpotencia en el Medio Oriente, especialmente con la retirada estadounidense de la región. No solo están vendiendo sistemas de misiles S-400 a Turquía, sino también tanques de batalla T-90 a Irak y están tratando de venderlos a Egipto, que está casi completamente restaurando sus aviones militares, aviones de combate SU-35. El Cairo también acaba de comprar submarinos avanzados de Alemania.