Fuentes israelíes informaron que Israel está investigando si Hassan Nasrallah, líder de Hezbolá, se encontraba en la sede central del grupo en Beirut cuando la Fuerza Aérea israelí atacó el lugar recientemente.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron que el objetivo fue la sede central de Hezbolá, construida debajo de edificios civiles en el suburbio de Dahiyeh, conocido bastión de la organización en la capital libanesa, pero no precisaron si Nasrallah era el objetivo principal del ataque.
Una fuente de seguridad libanesa citada por Reuters señaló que los altos dirigentes de Hezbolá suelen reunirse en el lugar atacado, lo que ha intensificado las especulaciones sobre la posible presencia de Nasrallah durante el bombardeo.
Fuentes de seguridad del Líbano confirmaron que el ataque tuvo como objetivo una zona habitada por altos funcionarios de la organización, constituyendo el ataque más grave en Beirut en casi un año de conflicto entre Israel y Hezbolá.
Al-Manar, el canal de televisión de Hezbolá, reportó que cuatro edificios fueron destruidos y se registraron múltiples víctimas tras los ataques. Las imágenes transmitidas por la cadena muestran al menos un cráter humeante en el lugar del impacto.
El portavoz de las FDI, contralmirante Daniel Hagari, detalló que la Fuerza Aérea israelí llevó a cabo el ataque contra el cuartel general principal de Hezbolá, el cual estaba construido debajo de edificaciones civiles en Dahiyeh. Además, Hagari declaró que, a pesar de la operación militar, no se han emitido cambios en las directrices para la población civil de Israel.
Imágenes difundidas por medios libaneses muestran la intensidad de los ataques a la sede de Hezbolá, destacando la gravedad del operativo militar en Beirut.