Durante la noche del martes, fuerzas especiales israelíes, apoyadas por tropas adicionales, llevaron a cabo una operación en el hospital Shifa, en la ciudad de Gaza, dirigida contra la infraestructura de Hamás en el lugar.
La operación, descrita como “precisa y selectiva”, continuó en la mañana, cuando las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) descubrieron armamento y activos de Hamás dentro del hospital. En un enfrentamiento, al menos cinco hombres armados de Hamás fueron abatidos, sin bajas entre las tropas israelíes.
Un oficial militar, en condición de anonimato, indicó que se hallaron “pruebas concretas” del uso del hospital por Hamás como instalación militar. Se planea divulgar públicamente parte de lo encontrado. No se registraron enfrentamientos entre las tropas y el personal o pacientes del hospital. Las FDI trajeron de Israel equipos médicos esenciales, incluyendo incubadoras para neonatos, alimentos infantiles y suministros médicos.
Los suministros fueron entregados en Shifa, con la ayuda de “equipos médicos y soldados que hablan árabe” para asegurar su correcta distribución y proteger a los civiles. El ejército solicitó la rendición de los miembros de Hamás presentes en el hospital.
La agencia AFP citó una fuente del hospital, que informó sobre la presencia activa de las fuerzas israelíes en el interior, incluyendo disparos de advertencia. Sin embargo, esta información no fue confirmada por las FDI. Por otro lado, un reporte de la BBC, basado en el testimonio de un periodista local, Khader, contradice esta versión, indicando que no se efectuaron disparos y que los soldados, acompañados de médicos y personal que habla árabe, se desplazaron interrogando a las personas.
Según Khader, las FDI ejercieron un “control total” sin uso de armas de fuego. Posteriormente, se reportó que los soldados israelíes instaron a hombres entre 16 y 40 años a evacuar ciertas áreas del hospital, usando disparos al aire para garantizar el cumplimiento de la orden. Además, se instaló un dispositivo de escaneo y detección, y se solicitó a los hombres pasar por él. La BBC aclara que no pudo verificar estos reportes independientemente.
Las FDI sostienen que el hospital sirve de cobertura para un centro de mando subterráneo fortificado de Hamás, aunque la ubicación exacta de sus líderes, tras el inicio de la ofensiva terrestre israelí en el norte de Gaza, es incierta. Testigos describen condiciones extremas en el hospital, con procedimientos médicos sin anestesia, escasez de alimentos y agua, y el hedor de cuerpos en descomposición.
Las FDI enfatizan que su presencia en el hospital no constituye una invasión, sino una operación “concentrada” en una “zona definida” del mismo.
Las FDI han llevado a cabo una operación en el hospital Shifa en Gaza, aunque no hay indicios de rehenes en el lugar actualmente. “Nuestro objetivo es traer [a los rehenes] a casa. Nuestro objetivo es buscar a Hamás allí donde se esconda”, expresó el teniente coronel (reserva) Peter Lerner a CNN.
La ONU ha mostrado su consternación por la operación. Martin Griffiths, jefe humanitario de la ONU, enfatizó la importancia de proteger a los recién nacidos, pacientes, personal médico y civiles, remarcando que “los hospitales no son campos de batalla”.
Youssef Abul Reesh, del Ministerio de Sanidad dirigido por Hamás, informó sobre la presencia de tanques y soldados israelíes en el hospital. Un funcionario de seguridad anónimo indicó a Radio Ejército que la operación podría expandirse si es necesario, añadiendo que “la entrada de tropas en Shifa es más un desafío mediático que operativo”.
Las FDI han solicitado la evacuación del hospital desde el inicio del conflicto, pero no se ha llevado a cabo. Miles de desplazados refugiados en el hospital han evacuado hacia el sur de Gaza aprovechando rutas seguras, junto con pacientes y parte del personal médico.
Naciones Unidas estima que al menos 2.300 personas – entre pacientes, personal y civiles desplazados – permanecen en el hospital, posiblemente incapaces de escapar debido a los combates en la zona.
Las FDI también anunciaron la muerte de dos oficiales y heridas graves a cuatro soldados en los combates del martes en Gaza. Además, informaron del asalto a una base de entrenamiento de Hamás, localizando un túnel y armas, y del ataque con drones a dos agentes de Hamás sospechosos de colocar artefactos explosivos.
Antes de un posible asalto al hospital Shifa, el primer ministro Benjamin Netanyahu dialogó extensamente por teléfono con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden. La conversación se enfocó en los esfuerzos para liberar a los rehenes en Gaza.
El martes, Biden confirmó las acusaciones de Israel sobre el uso de instalaciones médicas por Hamás para fines militares. “Hamás y la Yihad Islámica Palestina utilizan algunos hospitales de Gaza, incluido Al Shifa, y túneles bajo ellos para ocultar y apoyar sus operaciones militares y retener rehenes”, afirmó John Kirby durante una conferencia de prensa.
Kirby aclaró que EE. UU. no respalda un ataque aéreo de Israel contra el centro médico. Subrayó la necesidad de proteger a los hospitales y pacientes, mencionando que personas inocentes no deben quedar atrapadas en el conflicto.
Hamás reaccionó acusando a la Casa Blanca de facilitar “masacres brutales” de Israel contra hospitales de Gaza. El grupo señaló a Estados Unidos como responsable de la “guerra genocida” israelí en Gaza.
La situación en Shifa y otros hospitales, ya afectados por la escasez de suministros y muertes de pacientes debido a los combates, incrementó la presión sobre Israel para proteger a los civiles. Estados Unidos y Europa han instado a Israel a salvaguardar estos centros médicos.
El portavoz de las FDI, contralmirante Daniel Hagari, declaró que los hospitales de la Franja corren el riesgo de perder su estatus de protegidos internacionalmente por ser utilizados por Hamás para actividades militares. “Hamás utiliza los hospitales como escudos humanos”, dijo Hagari, quien instó a los operativos de Hamás a rendirse.
Hagari informó que el Hospital Al-Quds en Gaza había sido evacuado y que los heridos fueron trasladados a hospitales del sur de Gaza. Además, se reportó que Hamás disparó contra tropas israelíes desde varios hospitales.
El Ministerio de Sanidad de Gaza, controlado por Hamás, reportó 11.240 muertes en Gaza desde el inicio de la guerra, aunque estos números no distinguen entre civiles y combatientes. Estos datos incluyen también víctimas de lanzamientos fallidos de cohetes palestinos.