Familiares y amigos del oficial de inteligencia de las FDI que murió mientras estaba en una prisión militar hace un mes han visitado la tumba del soldado, al concluir el período de luto de los shloshim.
El padre del soldado relató a los reunidos sus “intentos de armar el rompecabezas y averiguar exactamente lo que le sucedió: un soldado talentoso y ambicioso que se encontró aplastado sin piedad por el sistema militar”.
“Nuestro hijo fue asesinado -continuó-, asesinado indirectamente, e incluso ahora siguen ensuciando su reputación con todo tipo de filtraciones sensacionalistas. Ya no está aquí para dar explicaciones de por qué hizo lo que hizo, y las huellas que dejó de una negligencia totalmente inusual en su trabajo”, añadió el padre, la angustia evidente en su voz.
“También estamos enfadados por no haber sido informados, antes de su muerte, de dos episodios médicos que sufrió mientras estaba en la cárcel; estamos enfadados por haber seguido durmiendo tranquilamente por la noche durante ese tiempo”, dijo.
También estuvo presente en la reunión un oficial con el rango de general de brigada que está adscrito a la rama tecnológica de la inteligencia militar, así como el oficial de bajas de la división.
La semana pasada, el Jefe del Estado Mayor de las FDI, Aviv Kohavi, hizo varios comentarios relacionados con la muerte del soldado mientras estaba en prisión, diciendo: “Este oficial de inteligencia cometió graves delitos, a sabiendas y con intención, pero sigue siendo considerado uno de nuestros soldados. Estuvo en contacto con su familia y con otras personas mientras estaba en prisión, y todo lo que hicimos surgió del deseo de proteger su intimidad y la de su familia, así como del deseo de proteger la información confidencial que estuvo a punto de revelar, y que conseguimos evitar en el último momento.”
Kochavi añadió que “me duele mucho lo que ha ocurrido, y no debería haber muerto en la cárcel. Por lo tanto, el incidente será investigado en profundidad, y haremos todo lo posible para que la información confidencial no sea revelada.”
La familia del soldado optó por emitir su respuesta a las palabras del Jefe del Estado Mayor a través de su abogado, Benny Koznitz: “Con el debido respeto al Jefe del Estado Mayor, las FDI no cumplieron con su deber de proteger la vida de este soldado mientras estaba en la prisión militar y bajo observación. La familia exige una investigación exhaustiva y transparente del incidente para identificar los fallos concretos y abordarlos”.