Amnistía Internacional ha solicitado una investigación sobre los crímenes de guerra que presuntamente ha cometido Israel al destruir viviendas y granjas en el este de Gaza. Estas acciones buscan ampliar la denominada zona de amortiguamiento entre el país y el territorio palestino.
“El ejército israelí, utilizando excavadoras y explosivos manuales, ha demolido ilegalmente tierras agrícolas y edificios civiles, eliminando barrios completos, incluidas casas, escuelas y mezquitas”, declaró la organización.
La organización de derechos humanos con sede en Londres sostiene que la devastación iniciada con la guerra del 7 de octubre “debería ser investigada como crímenes de guerra por destrucción innecesaria y castigo colectivo”.
Por su parte, Israel argumenta que la creación de esta zona de amortiguamiento tiene como objetivo mejorar la protección de las comunidades israelíes que se encuentran al otro lado de la valla, después de que fueran atacadas por miles de terroristas que cruzaron la frontera en los ataques del 7 de octubre.