El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, expresó el jueves su convicción de que su gobierno podrá alcanzar un acuerdo sobre la liberación de rehenes. Sin embargo, afirmó que Hamás representa el principal obstáculo para lograrlo.
Este posicionamiento refleja la postura que Washington ha mantenido durante meses. No obstante, Biden no había intervenido personalmente en las negociaciones en las últimas semanas. El mandatario abordó el tema tras ser consultado durante una conferencia de prensa en la Casa Blanca, que estaba centrada en los incendios forestales en Los Ángeles.
Al ser interrogado sobre los avances en las negociaciones, Biden fue cauto al compartir detalles, pero afirmó: “Estamos logrando progresos reales”. Asimismo, comentó que había mantenido una conversación ese mismo día con los negociadores estadounidenses. Pese a la situación, manifestó su esperanza de que se pueda concretar un intercambio de prisioneros.
Biden apuntó que Hamás es el mayor obstáculo para el intercambio en este momento, pero subrayó que lograr un acuerdo es necesario. Desde hace más de un año, la administración estadounidense ha responsabilizado a Hamás por la falta de un alto el fuego en Gaza.
Diplomáticos egipcios y qataríes, junto con negociadores israelíes y funcionarios estadounidenses, han señalado que la negativa del primer ministro Benjamin Netanyahu a aceptar un alto el fuego permanente ha dificultado las negociaciones. Pese a ello, Estados Unidos no ha expresado esta posición de manera pública.
En una entrevista reciente, el secretario de Estado Antony Blinken sugirió que la presión ejercida por Estados Unidos sobre Israel ha provocado un endurecimiento de las posturas de Hamás. Blinken indicó que las conversaciones están cerca de alcanzar un acuerdo para el alto el fuego y la liberación de rehenes, aunque podría concretarse durante la próxima administración.
Por otra parte, el enviado de rehenes de Netanyahu se reunió el jueves con representantes de las familias de los rehenes, quienes están molestos por los esfuerzos del gobierno para alcanzar un acuerdo que solo liberaría a un tercio de los 98 rehenes restantes. Gal Hirsch aseguró que el alto el fuego temporal es solo una parte de un acuerdo más amplio y que las siguientes fases incluirán la liberación de los rehenes restantes.
Sin embargo, la intención de Netanyahu de reanudar los combates tras la primera fase del acuerdo genera preocupación entre las familias. Temen que no haya una segunda o tercera fase que garantice la liberación de los cuerpos de los rehenes asesinados, y que sus seres queridos no sobrevivan al cautiverio prolongado.
Durante la reunión, Hirsch evitó confirmar que el gobierno esté dispuesto a poner fin a la guerra de manera permanente, lo cual es una condición que Hamás ha establecido para liberar a los rehenes restantes. Además, el jueves, la ex rehén Sharon Cunio difundió un video en árabe pidiendo a Hamás pruebas de vida de su esposo David.
Cunio citó un pasaje del Corán que llama a los musulmanes a tratar a los rehenes con compasión. Al mismo tiempo, más de 800 padres de soldados israelíes enviaron una carta abierta a Netanyahu, exigiendo un acuerdo inmediato y amenazando con iniciar una protesta masiva si no se logra un avance en las negociaciones.
Desde el inicio de la guerra el 7 de octubre de 2023, 396 soldados israelíes han muerto en Gaza, además de un contratista del Ministerio de Defensa y un oficial de policía. Los ataques aéreos israelíes continuaron el jueves en el norte y centro de la Franja de Gaza, un día después de que se recuperara el cuerpo de un rehén que se creía vivo.
Los funcionarios de salud de Gaza, controlada por Hamás, estiman que la guerra ha dejado más de 46.000 muertos en 15 meses de combates, aunque estas cifras no han sido verificadas de forma independiente. Hamás ha insistido en un alto el fuego permanente, pero también ha mostrado disposición a priorizar la primera fase del acuerdo de tres etapas.
Un diplomático árabe informó que Hamás aprobó la liberación de 34 rehenes como parte de este acuerdo. Sin embargo, Hamás alega que no tiene información sobre la ubicación de todos los rehenes, pero que podría obtenerla si Israel acepta un breve alto el fuego. Israel ha rechazado esa propuesta, sosteniendo que Hamás sabe dónde están todos los rehenes.
El gobierno israelí busca maximizar el número de rehenes liberados en cada fase del acuerdo, mientras Hamás intenta retener a la mayor cantidad posible de cautivos, previendo que Israel retomará los combates una vez que concluya el alto el fuego temporal. Según estimaciones de la inteligencia israelí, la mitad de los rehenes siguen con vida.
Netanyahu ha defendido un alto el fuego temporal y argumenta que un fin permanente de la guerra permitiría a Hamás recuperar el control de Gaza. Encuestas recientes muestran que la mayoría de los israelíes rechazan la estrategia de Netanyahu.
Diversos sectores del aparato de seguridad israelí consideran que la política de Netanyahu carece de una estrategia de salida viable. Han pedido que se permita a la Autoridad Palestina asumir el control en Gaza, pero Netanyahu se opone a esa opción, equiparando a la AP con Hamás. Esta postura ha sido respaldada por sus socios de coalición, quienes amenazan con derrumbar el gobierno si se otorga poder a Ramallah.
El establecimiento de seguridad también aboga por un acuerdo más amplio para liberar a los rehenes, argumentando que las FDI pueden regresar a Gaza si es necesario. Temen que posponer la liberación de los rehenes restantes en un acuerdo temporal pueda sentenciar a muerte a muchos de ellos.
Aunque el alto el fuego que impulsan mediadores estadounidenses, qataríes y egipcios sigue basándose en tres fases, Israel reconoce que la segunda y tercera etapas no ocurrirán de inmediato tras la primera. Estas fases incluyen la liberación de los rehenes vivos restantes y la recuperación de los cuerpos de los asesinados. El miércoles, las FDI informaron haber recuperado el cuerpo de Youssef Ziyadne y hallaron indicios que preocupan sobre la situación de su hijo Hamza.
Hamás ha solicitado garantías de los mediadores de que habrá continuidad entre las fases del acuerdo, mientras busca un alto el fuego permanente. Qatar ha acogido reuniones entre delegaciones israelíes y de Hamás, pero hasta ahora no se ha informado de avances significativos.