El ejército de Bielorrusia movilizará al menos 3.000 soldados a partir del 10 de agosto, antes de las elecciones presidenciales de agosto, en medio de preocupaciones por una posible invasión rusa.
Un oficial militar de Bielorrusia confirmó en a Defence Blog el 4 de agosto que el Ministerio de Defensa de la República de Bielorrusia movilizará a sus reservistas militares, pero no se proporcionó información sobre la causa y el número de posibles reservistas.
Fuentes locales también dijeron que el Ministerio de Defensa de ese país tiene previsto movilizar hasta 3.000 militares.
Sin embargo, Belaruspartisan.by informó de que los residentes de la región de Vitebsk, región fronteriza con Rusia, reciben llamadas y tarjetas de reclutamiento de las oficinas de registro y alistamiento militar. Las oficinas de registro y alistamiento militar informan sobre la movilización de hombres menores de 35 años, que anteriormente sirvieron en las filas de las Fuerzas Armadas.
Los ex militares deben presentarse en los puntos de reunión el 10 de agosto, es decir, el día después de la votación en las elecciones presidenciales. Está previsto que los reclutas sean enviados a un campo de entrenamiento de 25 días.
Además, el ejército de Bielorrusia está desplegando tropas adicionales en la frontera con Rusia por motivos de prevenir una posible invasión.
Bielorrusia teme que Rusia pueda aprovecharse de la inestabilidad del país y llevar a cabo el mismo escenario ucraniano para ocupar parte de los territorios antes de las elecciones presidenciales de agosto.
La agencia de noticias estadounidense CNBC, citando a Janusz Bugajksi del Centro de Análisis de Políticas Europeas, informó de que Putin podría utilizar “el pretexto de los crecientes disturbios en Bielorrusia y las controvertidas elecciones presidenciales” como una oportunidad para actuar como libertador nacional con la “perspectiva inminente” de la absorción de Belarús en Rusia.
Tras el arresto esta semana de 32 rusos en un sanatorio cerca de Minsk, el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, acusó al contratista militar Wagner vinculado al Kremlin de enviar a 200 de sus mercenarios para desestabilizar su país antes de su elección, en la que se enfrenta a un desafío de tres grupos de oposición.
El presidente de Bielorrusia, Alyaksandr Lukashenka, también acusó a Rusia de “intenciones sucias” y dio instrucciones al jefe del servicio de seguridad de la KGB, Valer Vakulchyk, para que pidiera una explicación a Moscú.
“Tenemos que pedir urgentemente a las estructuras pertinentes de la Federación Rusa que expliquen lo que está pasando”, dijo en una reunión de seguridad.