El Departamento de Estado de Estados Unidos ha instruido a las familias del personal de su embajada en Beirut a abandonar el país, además de autorizar la salida de algunos funcionarios, en medio de la intensificación de la guerra entre Israel y Hezbolá.
La decisión fue tomada “debido a la creciente volatilidad tras los ataques aéreos en Beirut y la inestable e impredecible situación de seguridad en todo el Líbano”, según informó el departamento. Asimismo, se recomienda a todos los ciudadanos estadounidenses que se encuentren en el país que lo abandonen “mientras sigan existiendo opciones comerciales” para facilitar su salida.