La historia de un judío estadounidense viviendo en Groenlandia durante 22 años.
Vida en Narsaq: Un rincón de civilización en Groenlandia
Paul Cohen, un judío estadounidense, vive en la remota localidad de Narsaq, Groenlandia, donde ha estado durante 22 años junto con su esposa Monika. Aunque la población del pueblo es superada por ovejas en una proporción de 20 a 1 y solo se puede llegar en helicóptero o barco, Cohen encuentra compensación en los impresionantes paisajes, aire limpio y un estilo de vida relajado.
Groenlandia, territorio semiautónomo del Reino de Dinamarca, es la isla más grande del mundo con una población de solo 56.000 habitantes, en su mayoría inuit. Cerca del 80% de la superficie de la isla está cubierta por hielo.
Para Cohen, la vida en Narsaq es como estar en el “Jardín del Edén,” disfrutando de un pequeño rincón de civilización rodeado de naturaleza virgen, donde tiene el privilegio de vivir y trabajar.
La historia de Cohen: De Wisconsin a Groenlandia
Cohen, quien se describe como “no observante, pero culturalmente judío”, creció en Wisconsin y luego se trasladó a Alemania en 1991, donde conoció a Monika. Casados durante 32 años, ambos viven en Narsaq con su perro Spitz japonés llamado Mikisoq (“pequeño” en groenlandés).
Visitaron Groenlandia por primera vez en 1993 como turistas, y tres años después decidieron que era el lugar donde querían pasar el resto de sus vidas. Compraron una casa y se mudaron definitivamente a Narsaq en 2001.
En sus inicios, Cohen planeaba trabajar como traductor, pero la velocidad de Internet en Narsaq era lenta, por lo que la pareja pintaba casas. Con la mejora de la velocidad de Internet, Cohen comenzó a recibir más proyectos de traducción, creando una empresa llamada Tuluttut Translations.
Traductor y emprendedor: El trabajo de Cohen en Groenlandia
Cohen, un políglota que domina cuatro idiomas, ha traducido cientos de artículos y libros académicos. Trabajó durante casi una década como traductor y productor en la DW-TV de Berlín antes de mudarse a Groenlandia.
En Narsaq, además de su trabajo de traducción, Cohen y su esposa dirigen un negocio de alquiler de propiedades a viajeros, poseyendo dos cabañas de verano con capacidad para ocho personas.
A pesar de algunos desafíos, como la falta de ciertas comodidades y el difícil acceso a sus frutas y verduras favoritas, Cohen tiene casi todo lo que quiere en Narsaq, excepto la facilidad para visitar a su madre en Wisconsin, lo cual hace cada dos años.
Narsaq: Economía, vecinos y estilo de vida
La economía de Narsaq se basa en la cría de ovejas y la pesca, con algo de turismo. Con unos 1.300 habitantes, es la novena ciudad más grande de Groenlandia.
Cohen aprecia la forma de vida de sus vecinos y la espontaneidad de las visitas. La conexión de carreteras en Groenlandia es inexistente, lo que dificulta los viajes entre ciudades y asentamientos.
Aunque hay registros de vida judía en Groenlandia desde el siglo XVI, nunca ha habido una comunidad judía organizada. Cohen probablemente sea el judío que más tiempo ha vivido en Groenlandia, algo que le hace sentir como “una especie de orquídea rara en la tundra”.