El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, destacó que Siria enfrenta una nueva realidad política y diplomática, marcando un cambio significativo en la dinámica de la guerra en el país vecino.
En declaraciones realizadas en Gaziantep, al sur de Turquía, Erdogan afirmó: “Siria pertenece a los sirios, con todos sus elementos étnicos, sectarios y religiosos. El pueblo sirio es quien decidirá el futuro de su propio país”.
Mientras tanto, rebeldes sirios avanzaron rápidamente hacia los suburbios de Homs, abriendo una vía hacia Damasco. Este avance ocurre en un contexto de colapso de las líneas del frente y esfuerzos desesperados de las fuerzas gubernamentales por mantener el régimen de Bashar al-Assad, en el poder desde hace 24 años.
Turquía, que ha respaldado a las fuerzas de oposición y realizado operaciones contra fuerzas kurdas a las que califica de terroristas, sigue desempeñando un papel clave en la región.