El Departamento de Estado de EE.UU. dijo el lunes que los ciudadanos estadounidenses deberían reconsiderar sus viajes a Ucrania en medio de las crecientes amenazas de Rusia y que sigue desaconsejando viajar al país debido a la actual pandemia de COVID-19.
Aunque la advertencia de viaje se debe principalmente a la pandemia, EE.UU. reformuló la advertencia para incluir una petición de “mayor precaución debido a la delincuencia y los disturbios civiles”.
También se emitieron advertencias de viaje específicas para las provincias de Donetsk y Luhansk y Crimea debido a la ocupación rusa de las zonas.
A principios de diciembre, Estados Unidos instó a Rusia a retirar sus tropas de la frontera ucraniana, advirtiendo que una invasión rusa provocaría sanciones que golpearían a Moscú con más fuerza que las impuestas hasta ahora.
Rusia niega su intención agresiva en la crisis actual y dice que responde a un comportamiento amenazante de la OTAN y Ucrania.
“No sabemos si el presidente Putin ha tomado la decisión de invadir. Lo que sí sabemos es que está poniendo en marcha la capacidad de hacerlo en poco tiempo en caso de que así lo decida”, dijo el secretario de Estado estadounidense Antony Blinken.
Moscú, que ha desconcertado a Occidente con la acumulación de tropas cerca de Ucrania, presentó la semana pasada una lista de propuestas de seguridad que quiere negociar, incluida la promesa de que la OTAN renuncie a cualquier actividad militar en Europa del Este y Ucrania.
Washington ha dicho que algunas de las propuestas de Rusia son obviamente inaceptables, pero que Estados Unidos responderá en algún momento de esta semana con propuestas más concretas sobre el formato de las conversaciones.