Furiosos con el presidente Biden por haberlos dejado fuera de un acuerdo de defensa con Australia y el Reino Unido, los funcionarios franceses cancelaron en el último minuto una gala del viernes que debía celebrar las relaciones entre Estados Unidos y Francia en la embajada en Washington.
Estados Unidos, Australia y Gran Bretaña anunciaron el miércoles un acuerdo a tres bandas que ayudará a Australia a contrarrestar cualquier agresión de China en la región. Estados Unidos proporcionará a Australia submarinos de propulsión nuclear, lo que los funcionarios franceses han calificado de “puñalada por la espalda”.
A última hora del miércoles, el contrato de submarinos por valor de 40.000 millones de dólares firmado en 2016 con una empresa francesa pasó a manos de la recién creada asociación apodada “AUKUS”.
Mientras que el acuerdo con Francia habría proporcionado a Australia submarinos convencionales, la nueva alianza concederá en cambio a la nación del Indo-Pacífico tecnología de submarinos nucleares altamente sensibles.
“Esto permitirá al Departamento de Defensa cumplir con su misión de proteger a Australia y sus intereses nacionales, y la de nuestros amigos regionales, en el futuro”, dijo el primer ministro australiano Scott Morrison en Twitter. (Fox News)
“Esta decisión brutal, unilateral e imprevisible me recuerda mucho a lo que hacía el señor Trump”, ha declarado a los medios franceses Jean-Yves Le Drian, ministro de Asuntos Exteriores de Francia. “Estoy enfadado y amargado. Esto no se hace entre aliados”.
Según The New York Times, Francia había estado tratando de llegar a un acuerdo con Australia en ese momento.
“Habíamos establecido una relación de confianza con Australia. Esta confianza ha sido traicionada”, dijo Le Drian.
Los funcionarios franceses describieron la exclusión de Francia, un miembro de la OTAN, de la nueva asociación militar británico-australiana-estadounidense como un momento que profundizará una brecha ya creciente entre aliados de larga data. El presidente Emmanuel Macron ya ha dicho que tiene la intención de buscar la “autonomía estratégica” de Francia con respecto a Estados Unidos. (NYT)
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, trató de restar importancia a la desavenencia, diciéndole a un reportero que le preguntara a Australia por qué buscaban nueva tecnología.
“No vemos esto, desde nuestro punto de vista, como una división regional. Lo vemos como áreas de seguridad, cuestiones de seguridad que queremos abordar juntos”, dijo.