El grupo terrorista Hezbolá apoyado por Irán y sus aliados políticos obtuvieron ganancias significativas en las elecciones parlamentarias del domingo en Líbano, mientras que el Movimiento Futuro del primer ministro Saad Hariri sufrió pérdidas, según los resultados preliminares y extraoficiales publicados en medios libaneses el lunes.
Los resultados, que más o menos se espera coincidan con el recuento oficial, muestran que Hariri, un político sunita con estrechos vínculos con Arabia Saudita, hasta ahora ha perdido cinco escaños en Beirut, alguna vez considerado el bastión de su partido.
De confirmarse, los resultados serían otro impulso para los aliados de Irán en el Líbano y la vecina Siria, donde ha visto crecer su fortaleza en los últimos años.
Esto indica que los votantes sunitas están perdiendo la fe en el partido de Hariri en medio de una economía estancada y una exasperación general por la guerra civil en la vecina Siria, que ha traído 1 millón de refugiados al Líbano. Hariri todavía tendría el mayor bloque sunita en el parlamento, lo que facilitaría su regreso como primer ministro para formar el próximo gobierno a pesar de las pérdidas.
Se espera que los resultados oficiales sean anunciados por el ministro del Interior, Nouhad Machnouk, más tarde el lunes, aunque no se ha fijado el tiempo. Se esperaba que tanto Hariri como el líder de Hezbolá, Hassan Nasrallah, conversen más tarde en el día.
El próximo gobierno de Líbano, como el saliente, probablemente sea un gobierno de unidad que incorpore a los oponentes de Hariri del grupo chiita Hezbolá.
Hezbolá y sus aliados parecen estar listos para tomar al menos 47 escaños en el parlamento de 128 escaños, lo que les permitiría vetar cualquier ley a la que que el grupo terrorista chiita se oponga. El grupo, según los resultados extraoficiales, agregó un asiento y ahora tiene un bloque de 13 en el parlamento, conocido como el bloque «Lealtad a la resistencia».
Los políticos pro sirios hicieron su regreso más fuerte desde que Damasco puso fin a casi tres décadas de presencia militar en 2005. Aliados sirios inconfundibles que fueron elegidos el domingo incluyen al ex jefe de seguridad Jamil Sayyed, el ex vicepresidente del parlamento Elie Firzly y el ex ministro de Defensa Abdul-Rahim Murad.
El grupo Hezbolá es considerado una organización terrorista por los Estados Unidos, mientras que la Unión Europea enumera el ala militar de Hezbolá como terrorista, distinguiendo entre sus actividades militares y políticas. Hezbolá ha enviado a miles de sus combatientes a Siria para apoyar a las fuerzas del presidente Bashar Assad. Eso, y su intervención en Irak y Yemen, han llevado a varios estados del Golfo ricos en petróleo a nombrarlo también como un grupo terrorista.