La radiotelevisión pública irlandesa RTÉ declaró este jueves que Irlanda no participará en el Festival de la Canción de Eurovisión de 2026 cuando Israel tome parte en él. La entidad calificó de inadmisible esa situación porque ocurre la guerra en Gaza. En un comunicado difundido en línea, RTÉ afirmó que “la postura de RTÉ consiste en que Irlanda no participará en el Festival de la Canción de Eurovisión de 2026 si se confirma la presencia de Israel”. La decisión definitiva se adoptará después de que la Unión Europea de Radiodifusión (UER) emita su fallo al respecto.
Varios miembros plantearon inquietudes durante una asamblea general celebrada en julio, según precisó RTÉ. En la breve declaración, la entidad explicó que “RTÉ considera inadmisible la participación de Irlanda ante la continua y espantosa pérdida de vidas en Gaza”. RTÉ expresó una profunda preocupación por los asesinatos selectivos de periodistas en Gaza, por la negación de acceso a la zona para reporteros internacionales y por la situación de los rehenes que aún permanecen cautivos.
Israel combate contra Hamás en Gaza desde la masacre del 7 de octubre de 2023, dirigida por ese grupo terrorista. Ese ataque causó la muerte de unas 1.200 personas y el secuestro de otros 251 rehenes llevados a Gaza. Israel niega haber atacado deliberadamente a periodistas, aunque ha afirmado que eliminó a varios terroristas activos que utilizaban el periodismo como tapadera. Israel rechaza las acusaciones de genocidio y sostiene que realiza esfuerzos para reducir los daños a civiles, pero que Hamás emplea infraestructuras civiles.
Irlanda ha ganado Eurovisión en siete ocasiones, más que cualquier otro país salvo Suecia, con la que comparte el récord. El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, declaró en mayo que Israel debería quedar excluido. Al recordar que Rusia no ha podido participar desde su invasión de Ucrania en 2022, afirmó: “Israel tampoco debería, porque no podemos permitir dobles raseros en la cultura”. Eurovisión lo organiza la UER en colaboración con sus miembros, las radiotelevisiones públicas nacionales como la RTÉ de Irlanda y la Kan de Israel, en más de 35 países.
El anuncio de la radiotelevisión irlandesa se produjo después de que el ministro de Cultura español, Ernest Urtasun, declarara a principios de esta semana que España debería retirarse de Eurovisión si se permite la participación de Israel. En una entrevista concedida al canal de televisión español La hora de La 1, Urtasun manifestó que España no puede “normalizar la participación de Israel en eventos internacionales como si nada ocurriera”. “Eventos como Eurovisión o la Vuelta a España conllevan una cierta representación de un país”, dijo.
Urtasun aludió a la actual carrera de tres semanas del Gran Tour en España, que ha sufrido interrupciones repetidas por manifestantes propalestinos y antiisraelíes. Esas interrupciones han generado peticiones para que el equipo israelí se retire. “En el caso de Eurovisión, no se trata de un artista individual que participa, sino de alguien que lo hace en nombre de los ciudadanos de ese país”, agregó Urtasun. Mientras los artistas israelíes enfrentan escrutinio y presiones por la guerra de su país en Gaza, un concierto con todas las entradas vendidas del grupo electrónico israelí “Infected Mushroom” en Adelaida, Australia, se canceló este jueves.
La cancelación ocurrió debido a la presión de manifestantes antiisraelíes que han atacado locales durante la gira australiana del grupo bajo el lema “Boycott Infected Mushroom”. Una petición circulante impulsada por los manifestantes —que hasta ahora ha recabado algo más de 500 firmas— declara que los miembros del grupo son “embajadores culturales activos de la ideología sionista”, que “normalizan el colonialismo israelí de asentamientos, la violencia militar y el genocidio en curso en Gaza”. Sin aportar pruebas que respalden ninguna de sus afirmaciones, los manifestantes alegan en la petición que Infected Mushroom ha “actuado en eventos directamente vinculados a la recaudación de fondos para el ejército israelí y al duelo nacionalista”.
Los manifestantes alegan que Infected Mushroom ha “lanzado música y visuales que glorifican la victoria israelí y borran Palestina”. La petición también menciona los esfuerzos de recaudación del grupo para la fundación Tribe of Nova —que apoya a supervivientes y familias de las víctimas de la masacre dirigida por Hamás en el festival de música Nova el 7 de octubre de 2023—, y sostiene que esa entidad benéfica respalda el “rearme israelí e iniciativas de las FDI”. “Su silencio sobre el genocidio en Gaza no es apolítico: es estratégico”, insiste la petición.
La petición añade que “seguir dándoles plataforma, especialmente en un momento de hambruna masiva en Palestina, supone una traición a cualquier valor declarado de inclusividad, justicia o descolonización”. UniBar Adelaide, el local musical que iba a acoger la actuación, anunció la cancelación en Instagram y explicó que lo hacía para proteger a su personal del “vitriol” de quienes se oponían a la presencia del grupo musical israelí. “UniBar ADL es un local que valora la diversidad en sus reservas”, afirmó el establecimiento, que se presenta como un espacio que acoge “a artistas de comunidades diversas procedentes de todo el país y del mundo”.
El comunicado prosiguió con que “aunque el concierto de Infected Mushroom resultó popular entre el público, no todos los miembros de nuestra propia comunidad deseaban que se llevara a cabo”. El establecimiento añadió que toman en serio tales opiniones. Se subrayó que quienes se oponían a la actuación no presentaron a UniBar “ninguna prueba convincente de que el artista defienda o promueva la ideología sionista ni sea culpable de ninguna otra acusación que se le haya imputado”, pero aun así se cancelaba el espectáculo por motivos de seguridad. “Para un local independiente como el nuestro, lo primordial es la seguridad de nuestro personal y de los miles de artistas que han actuado y actuarán en el escenario de UniBar”, explicó.
El establecimiento explicó que “la protección frente al vitriol dirigido a algunos de los vinculados al local ocupa un lugar prioritario”. Concluyó con una reprimenda velada a los manifestantes antiisraelíes que habían forzado la cancelación del concierto, al afirmar que el local “es apolítico y respalda el derecho de todos a opinar siempre que las opiniones sean precisas y se expresen de manera respetuosa, sin malicia ni ataques personales”. “Esperamos que en el futuro el discurso público se conduzca de esta forma”. Boycott Infected Mushroom celebró la decisión de UniBar de cancelar el concierto, pero calificó su comunicado de “débil” y acusó al local de “mantenerse firmemente en la equidistancia”. Infected Mushroom no hizo comentarios inmediatos sobre la cancelación.