Al intervenir ante la Asamblea general de la ONU poco después del primer ministro Benjamín Netanyahu, el primer ministro irlandés Micheál Martin calificó las acciones de Israel en Gaza como “un abandono de todas las normas, de todas las reglas y del derecho internacional”.
“Lo que ocurre en Gaza no puede justificarse ni defenderse. Constituye una afrenta a la dignidad y a la decencia humanas. Es un abandono de todas las normas, de todas las reglas y del derecho internacional”, declaró.
Irlanda, que reconoció al Estado palestino el año pasado, se ha contado entre los países más críticos con Israel.
Martin acusó a Israel de utilizar el hambre como arma de guerra.
“Bebés que mueren de inanición mientras la ayuda se pudre en la frontera, personas abatidas cuando intentan desesperadamente conseguir alimentos para sus familias”, afirmó, reiterando las acusaciones de que Israel comete genocidio.
El dirigente irlandés añadió que, si bien Hamás “debe responder por sus crímenes” y “no puede tener ningún papel en el futuro gobierno de Palestina”, ningún delito, por atroz que sea, justifica un genocidio.
Israel rechaza con firmeza las acusaciones de genocidio y sostiene que la falta de alimentos en Gaza obedece al incumplimiento de las agencias de la ONU en la entrega de ayuda y al saqueo por parte de Hamás.