Josep Borrell, quien fue Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad durante los últimos cinco años, dimitió el sábado. Borrell fue un crítico destacado de Israel, especialmente durante la guerra de los últimos 14 meses, lo que provocó que Israel le negara una visita. Además, Borrell pidió sanciones a Israel por parte de los países de la UE.
Las críticas de Borrell a Israel provocaron confrontaciones con líderes europeos como el canciller alemán Olaf Scholz y el canciller austríaco Karl Nehammer, quienes le dijeron que no hablaba en nombre de sus países sobre Gaza.
Kaja Kallas, ex primera ministra de Estonia y firme defensora de Ucrania, fue nombrada para reemplazar a Borrell. En su primer día, Kallas viajó a Kiev, lo que subraya el cambio de enfoque que se espera en la política exterior de la UE.
Su nombramiento se ve como un cambio hacia una “nueva era” en las relaciones de la UE con Israel, después de la crítica constante por parte de Borrell y su predecesora, Federica Mogherini.
Kallas, quien ha respaldado el derecho de Israel a defenderse y condenado a Hamás por su ataque del 7 de octubre, también ha apoyado la solución de dos Estados. Se espera que su mandato se enfoque más en la guerra en Ucrania y otros temas globales, como la posible reelección de Donald Trump en EE. UU., que podrían tener un gran impacto en Europa.