La próxima semana, la OTAN llevará a cabo sus ejercicios anuales de disuasión nuclear en respuesta a las crecientes amenazas del presidente ruso Vladimir Putin de utilizar armas nucleares.
Según el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, “se trata de un entrenamiento normal que se realiza todos los años para mantener nuestra disuasión segura y eficaz”.
Declaró que las amenazas nucleares encubiertas del presidente Putin eran temerarias y peligrosas. “Rusia es consciente de que una guerra nuclear no se puede librar ni ganar”.
14 miembros de la alianza de la OTAN participarán en el ejercicio “Steadfast Noon”, de una semana de duración, que también incluirá aviones con capacidades adicionales, como aviones de inteligencia y de reabastecimiento. El objetivo del ejercicio de una semana de duración es asegurarse de que todo el personal y los equipos necesarios están preparados.
En las últimas semanas, Putin ha intensificado sus amenazas de desplegar armas nucleares en la guerra de Ucrania, a pesar de las advertencias de las naciones occidentales de que hacerlo tendría “repercusiones catastróficas”.
La semana pasada, el vicepresidente estadounidense Joe Biden hizo sonar la alarma del “Armagedón” en caso de que Putin utilizara armas nucleares.
Personas informadas de los preparativos declararon al Financial Times que los ejercicios se habían preparado ampliamente y pretenden transmitir un mensaje de seguridad.
Stoltenberg declaró: “Estamos vigilando continuamente las fuerzas nucleares de Rusia. Aunque no hemos notado ningún cambio en la postura nuclear rusa, seguimos estando en guardia”.