La Unión Europea fustigó el jueves la decisión de Israel de clasificar como organizaciones terroristas a seis organizaciones árabes palestinas afiliadas al Frente Popular para la Liberación de Palestina.
En una declaración publicada el jueves por la noche, la UE protestó por la decisión de Israel de calificar a los seis grupos en cuestión como organizaciones terroristas, señalando sus propios vínculos financieros con los grupos.
“La Unión Europea está orgullosa de su continuo apoyo a la sociedad civil que contribuye a los esfuerzos de paz y a la creación de confianza entre israelíes y palestinos”.
“La UE se toma muy en serio la inclusión en la lista de seis organizaciones palestinas por parte del Ministerio de Defensa de Israel. Estas inclusiones tienen consecuencias de gran alcance para las organizaciones en términos políticos, legales y financieros.”
La UE dijo que discutiría el asunto con Israel, y negó las afirmaciones anteriores de “mal uso” de los fondos de la UE por parte de las seis filiales del FPLP.
“Nos pondremos en contacto con las autoridades israelíes para obtener más información sobre la base de estas designaciones. La UE nunca ha financiado ni apoyará a ninguna organización terrorista. Ejerce la máxima diligencia para evitar cualquier situación de este tipo y se toma muy en serio estas acusaciones.”
“Si se aportaran pruebas fundadas de que algún beneficiario ha hecho un uso inadecuado de los fondos de la UE, la UE tomaría medidas para recuperar esos fondos. Las anteriores acusaciones de uso indebido de los fondos de la UE en relación con determinados socios palestinos de las OSC no han sido corroboradas.”
El pasado viernes, el ministro de Defensa, Benny Gantz, designó a seis grupos identificados con el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) como organizaciones terroristas: Unión de Comités de Mujeres Palestinas (UPWC), ADDAMEER – Asociación de Apoyo a los Prisioneros y Derechos Humanos, Centro Bisan de Investigación y Desarrollo, Organización Al-Haq, Defensa de los Niños Internacional-Palestina (DCI-P) y la Unión de Comités de Trabajo Agrícola (UAWC).
La comisionada de derechos humanos de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet, condenó el martes la medida, mientras que el gobierno de Biden reprendió a Israel por no haber coordinado supuestamente la medida con antelación con Estados Unidos, una afirmación que las autoridades israelíes negaron repetidamente.