Los jefes de la agencia de espionaje británica temen que el triunfo de los talibanes en Afganistán cree una “narrativa de victoria” para el islam radical e inspire ataques terroristas en Occidente.
“Es probable que grupos extremistas de diversa índole, incluidas las agrupaciones con sede en el Reino Unido que no tienen ninguna conexión significativa con Afganistán, traten de presentar este hecho a las personas que intentan reclutar o radicalizar como una victoria del islam extremista”, se quejó el director general del Servicio de Seguridad (MI5), Ken McCallum, en declaraciones recogidas por The Sunday Times.
“No soy yo quien dice que sea así, pero los extremistas tratarán de sacar provecho propagandístico de la situación en Afganistán”, añadió.
El Ministerio de Defensa ha advertido de las conexiones entre los islamistas con base en Afganistán y la amenaza terrorista para Gran Bretaña desde al menos 2018, cuando el entonces secretario de Defensa Gavin Williamson dijo a los medios que “Constantemente vemos grupos terroristas que operan aquí en Afganistán, [y] evidencia de sus vínculos de vuelta no solo al Reino Unido, sino a toda Europa continental”.
McCallum, a quien le preocupa tanto que los islamistas se vean simplemente “inspirados” a actuar por una victoria de los talibanes como que dicho grupo u otros jihadistas afganos dirijan sistemáticamente los atentados, hizo su intervención mientras el primer ministro Boris Johnson ha expresado su temor a que se considere que los soldados británicos y aliados han muerto en vano tras la prevista retirada de Afganistán.
“Si me preguntan si me siento feliz por la situación actual en Afganistán, por supuesto que no. Estoy preocupado”, dijo Johnson, en medio de informes generalizados sobre importantes avances de los talibanes contra el gobierno respaldado por Occidente a medida que las tropas occidentales se retiran del país en serio.
“Tenemos que ser absolutamente realistas sobre la situación en la que nos encontramos, y lo que tenemos que esperar es que la sangre y el tesoro gastados por este país durante décadas para proteger al pueblo de Afganistán no hayan sido en vano”, añadió.
Sin embargo, es posible que las fuerzas británicas no se retiren del todo de Afganistán, como se había anunciado, ya que fuentes de las fuerzas especiales han declarado a The Telegraph que es probable que mantengan su presencia en el país a principios de julio.
Una fuente del Servicio Aéreo Especial (SAS) dijo al periódico que su propósito sería “proporcionar entrenamiento a las unidades afganas y desplegarse con ellas sobre el terreno como asesores”.
“Mientras sigan viendo valor, mantendrán las fuerzas allí. No es un lugar agradable en este momento, la gente está asustada y con razón”, dijo la fuente.
“Los talibanes controlan el campo y solo esperan que la coalición [occidental] se vaya. Están dejando muy claro en cada oportunidad que su paz es con la coalición y no con el gobierno afgano. El país implosionará”.