El jefe de la diplomacia egipcia, Badr Abdelatty, se dirige a Washington para mantener reuniones con altos cargos estadounidenses y miembros del Congreso. Su visita coincide con la controversia generada por la propuesta de Donald Trump de reubicar a los habitantes de Gaza en Egipto y Jordania.
Mientras tanto, El Cairo anuncia la celebración de una “cumbre árabe de emergencia” el 27 de febrero, con el propósito de abordar las crecientes tensiones relacionadas con los palestinos.
Un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores egipcio detalla que el objetivo del viaje es fortalecer la cooperación bilateral y la asociación estratégica con Estados Unidos, además de intercambiar posturas sobre la situación en la región.
Egipto ha intensificado esfuerzos para consolidar una posición común con sus aliados árabes frente al plan de Trump. Abdelatty sostuvo conversaciones con representantes de Jordania, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos con el fin de reforzar la oposición a cualquier intento de expulsión forzada de los palestinos.
Días atrás, Trump presentó la idea de que Estados Unidos administre Gaza tras una reconstrucción del territorio, planteando convertirlo en la “Riviera del Medio Oriente” luego del reasentamiento de la población palestina en otras naciones, principalmente Egipto y Jordania.
El rechazo ha sido inmediato. Diversos países árabes han condenado la iniciativa y reiterado su postura a favor de una solución basada en dos Estados, con la creación de un Estado palestino soberano junto a Israel.