El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, acusó el miércoles a Bielorrusia de “terrorismo de Estado” en relación con la crisis de los migrantes en la frontera entre ambas naciones.
Morawiecki hizo estos comentarios a los periodistas durante una conferencia de prensa conjunta en Varsovia con el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, que vino a Polonia para mostrar el apoyo de la Unión Europea a Polonia en la situación de los migrantes.
Polonia y la UE acusan al gobierno del presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, de “armar” a los migrantes —en su mayoría procedentes de África, Oriente Medio y Afganistán— invitándolos a entrar en Bielorrusia y conduciéndolos a la frontera polaca, a veces por la fuerza.
Las tropas polacas se han enfrentado en varias ocasiones a los inmigrantes cuando intentaban cruzar la frontera por la fuerza. Funcionarios de seguridad polacos han dicho que podría haber hasta 12.000 migrantes en Bielorrusia acampados cerca de la frontera polaca.
En la conferencia de prensa, Morawiecki dijo que cree que las acciones en la frontera son una “venganza silenciosa” de Lukashenko porque Polonia, junto con otros países miembros de la UE, apoyó las sanciones que el bloque impuso a principios de este año contra Bielorrusia por violaciones de los derechos humanos. El gobierno de Lukashenko reprimió las protestas de la oposición y a los periodistas tras las controvertidas elecciones presidenciales del año pasado.
Michel calificó las acciones de Bielorrusia en relación con la situación en la frontera de “ataque híbrido, brutal, violento e indigno”, y dijo que la UE está estudiando una respuesta firme y unilateral, más inmediatamente en forma de sanciones adicionales.
Dijo que la UE está estudiando la posibilidad de bloquear las líneas aéreas bielorrusas —que han traído a algunos de los inmigrantes al país—, así como de imponer otras sanciones económicas, discutidas en una reunión del Consejo Europeo.
Mientras tanto, durante una conferencia de prensa en Moscú el miércoles, el ministro de Asuntos Exteriores de Bielorrusia, Vladimir Makei, calificó de absolutamente infundadas las acusaciones contra su país. El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, culpó a la UE de haber agravado la situación y pidió que se entablaran conversaciones directas entre ambas partes.
Rusia es el aliado más cercano de Bielorrusia en la región.