MOSCÚ – El primer ministro de Rusia Mikhail Mishustin le dijo al presidente Vladimir Putin el jueves que le habían diagnosticado el nuevo coronavirus y que se retiraba temporalmente para recuperarse.
Mishustin, de 54 años, sugirió que el Primer Viceprimer Ministro Andrei Belousov sirva como primer ministro interino en su ausencia. Putin, que nombró a Mishustin en enero, apoyó la propuesta.
Mishustin, que ha sido uno de los principales coordinadores de la respuesta de Rusia al nuevo coronavirus, es el primer funcionario ruso de alto rango que ha dicho públicamente que tiene el virus. Dio la noticia horas después de que el número de casos confirmados del virus en Rusia superara la marca de los 100.000.
Mishustin le contó a Putin su diagnóstico durante una videoconferencia televisada.
“Me he enterado de que las pruebas de coronavirus que hice dieron un resultado positivo”, dijo Mishustin. “Necesito autoaislarme y seguir las instrucciones de los médicos. Esto es necesario para la seguridad de mis colegas”.
Mishustin dijo que se mantendría en contacto con los miembros del gobierno y con Putin por teléfono y videoconferencia a pesar de su condición.
Putin le dijo a Mishustin que lo llamara tan pronto como llegara al hospital y le deseó una pronta recuperación.
El destino de Mishustin mostró que cualquiera podía contraer el virus, añadió Putin.
El recuento nacional de casos confirmados de coronavirus en Rusia superó la marca de los 100.000 el jueves pasado, después de un aumento diario récord de nuevas infecciones.
Esta semana Rusia superó a China e Irán en el número de casos confirmados derivados de la pandemia mundial.
Hasta ahora Rusia ha reportado 1.073 muertes relacionadas con el coronavirus, una cifra muy inferior a la de muchos de los países más afectados.
Putin ha advertido que el pico del brote aún no ha llegado, y las autoridades han dicho que podría haber un nuevo pico en los casos si la población se desentiende de las medidas de cierre durante los días festivos a principios de mayo.
Rusia, el país más grande del mundo por su territorio, ha estado bloqueado desde que Putin anunció el cierre de la mayoría de los espacios públicos a finales de marzo para limitar el alcance de la propagación del virus.
Putin y el gabinete han estado celebrando reuniones a distancia para evitar el contacto.