El presidente ruso, Vladímir Putin, acusa a Kiev de “crímenes de guerra” en una llamada con su homólogo francés, afirmando que Moscú estaba haciendo “todo lo posible” para evitar la muerte de civiles en Ucrania.
“Se llamó la atención sobre los numerosos crímenes de guerra cometidos diariamente por las fuerzas de seguridad ucranianas”, dice el Kremlin sobre la llamada entre Putin y Emmanuel Macron, que duró más de una hora.
“En particular, los ataques masivos con cohetes y artillería contra las ciudades de Donbás”, añade el Kremlin, en referencia al este rusoparlante de Ucrania, parte del cual está controlado por los separatistas pro-Moscú.
Putin le dice a Macron que el ejército ruso está “haciendo todo lo posible para salvaguardar la vida de los civiles pacíficos, incluso organizando corredores humanitarios para su evacuación segura”, dice el Kremlin.
En la llamada telefónica, ambos líderes también hablan de las conversaciones en curso entre Moscú y Kiev para poner fin al conflicto en Ucrania, que fue una “iniciativa francesa”, dice.
Macron expresa su “extrema preocupación” por la suerte de la ciudad ucraniana de Mariupol, e insta a “levantar el asedio y el acceso humanitario” a la ciudad.
Durante la última de varias llamadas telefónicas entre los dos líderes desde que comenzó la invasión rusa hace tres semanas, Macron “volvió a exigir el respeto inmediato de un alto el fuego” en Ucrania, dice la oficina de Macron.