MOSCÚ – El presidente ruso, Vladimir Putin, reiteró el viernes su afirmación de que los neonazis estaban cometiendo crímenes en Ucrania -una acusación que Moscú ha utilizado para justificar su intervención militar- mientras el mundo conmemoraba el Día de Recordación del Holocausto.
“Olvidar las lecciones de la historia conduce a la repetición de terribles tragedias”, dijo Putin.
“Prueba de ello son los crímenes contra civiles, la limpieza étnica y las acciones punitivas organizadas por los neonazis en Ucrania. Es contra ese mal contra el que luchan valientemente nuestros soldados”, afirmó en un comunicado.
Los partidarios de la operación militar de Putin alegan que el trato que Ucrania dispensa a los rusoparlantes en el país es comparable a las acciones de la Alemania nazi.
Uno de los objetivos de la operación era la “desnazificación” de Ucrania, dijo Putin cuando anunció hace casi un año que había ordenado el envío de tropas rusas a Kiev.
Estas afirmaciones han sido criticadas por el gobierno ucraniano, la comunidad judía del país y líderes mundiales.
La victoria de la Unión Soviética sobre el ejército de Hitler -durante mucho tiempo símbolo de orgullo patriótico para los rusos- ha ocupado un lugar central desde el comienzo de la intervención militar.
Putin dijo que “los intentos de revisar las contribuciones de nuestro país a la Gran Victoria (contra Hitler) equivalen en realidad a justificar los crímenes del nazismo y abren el camino al renacimiento de su ideología mortífera”.
El viernes se cumple el 78 aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau, construido por la Alemania nazi en la Polonia ocupada, fecha que se ha convertido en el Día Internacional de Conmemoración del Holocausto.
El museo de Auschwitz no invitó a representantes rusos a la ceremonia que conmemora el día en que el Ejército Rojo soviético liberó el campo nazi debido a la ofensiva en Ucrania.
“Rusia necesitará mucho tiempo y un profundo examen de conciencia después de este conflicto para volver a las reuniones del mundo civilizado”, declaró a la AFP Piotr Sawicki, portavoz del museo situado en el emplazamiento del antiguo campo.
El Gran Rabino ruso Berel Lazar declaró a la AFP que “para nosotros, se trata claramente de una humillación, porque conocemos y recordamos perfectamente el papel del Ejército Rojo en la liberación de Auschwitz y en la victoria sobre el nazismo”.
“Estos juegos políticos no tienen cabida en el día del Holocausto”, añadió Lazar.