El presidente ruso, Vladímir Putin, no entiende del todo por qué se imponen sanciones a Rusia y no considera que la situación de la economía rusa sea un desastre en medio del aumento del desempleo y la caída de los ingresos de los rusos.
“Nosotros no imponemos ninguna sanción. Sólo respondemos de alguna manera, solo donde es posible, para no perjudicarnos, para no dispararnos en el pie. Y por qué los socios estadounidenses hacen lo que están haciendo hasta ahora sigue siendo un misterio en muchos aspectos”, dijo Putin durante un discurso en el Foro Económico Internacional de San Petersburgo.
Según Putin, esto tiene lugar principalmente bajo la influencia de los procesos políticos internos de Estados Unidos, mientras que las relaciones ruso-estadounidenses son rehenes de estos procesos.
“No tenemos desacuerdos con Estados Unidos. Ellos solo tienen un desacuerdo. Quieren frenar nuestro desarrollo y hablar de ello públicamente. Todo lo demás se deriva de esta posición”, dijo Putin.
En cuanto a la economía rusa, “hay problemas”, reconoció el presidente. A causa de la pandemia, “tanto el desempleo ha aumentado, como los ingresos útiles han caído”.
“Pero no ha ocurrido nada que podamos calificar de desastre”, dijo Putin. “Nuestras decisiones de apoyo a las empresas, a los colectivos laborales, a las regiones, y la ayuda específica a las familias rusas fueron demandadas”.
Según el Servicio Federal de Estadística del Estado ruso, Rosstat, la renta real disponible de los ciudadanos rusos no ha dejado de caer desde 2014.
El año pasado, los ingresos cayeron un 3% y se situaron en un mínimo de 10 años. Los salarios en términos de dólares han caído al nivel de 2009.
En el primer trimestre de 2021, los ingresos reales cayeron un 3,6% y, por primera vez en 5 años, las pensiones reales se redujeron (un 0,1% en abril), ya que la inflación superó la indexación realizada por las autoridades rusas.