El servicio de prensa del Kremlin dijo el jueves que el presidente ruso Vladimir Putin no tiene planes de reunirse con el presidente turco Recep Tayyip Erdogan para discutir la situación en la provincia siria de Idlib, a pesar de las afirmaciones del líder turco de que es probable que se produzca tal reunión.
El presidente turco dijo antes que es probable que se reúna con Putin en Estambul para hablar sobre Idlib la próxima semana.
“Por el momento, no hay tal reunión en la agenda del presidente Putin para el 5 de marzo. El presidente Putin tiene otros planes de trabajo para el 5 de marzo”, dijo a los periodistas el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, citado por RIA Novosti.
Según el líder turco, recientemente mantuvo conversaciones telefónicas con el presidente ruso Vladimir Putin, tras las cuales se elaboró una hoja de ruta sobre Siria.
La conversación mencionada por Erdogan tuvo lugar el 21 de febrero, informó la agencia de noticias Anadolu. En la conversación, pidió la aplicación del acuerdo de Sochi. Según él, esta es la principal condición para resolver la situación en el Idlib de Siria. También dijo que el ejército sirio debe ser “contenido en la región” para evitar una crisis humanitaria.
Antes de las conversaciones, Erdogan describió la situación en la provincia como una “guerra a gran escala”, señalando que alrededor de un millón de personas están huyendo de los combates en Idlib.
El 18 de febrero, diplomáticos turcos y rusos celebraron conversaciones en Moscú en un intento de resolver la próxima crisis siria. Esas negociaciones no han dado resultados.
El 20 de febrero, alrededor de las 15.00 horas, hora local, en el noreste de la provincia siria de Idlib, las fuerzas pro turcas, con el apoyo de la artillería turca, iniciaron una ofensiva hacia la ciudad de Saraqib, que fue capturada por las fuerzas de Assad hace varias semanas. Menos de dos horas después del inicio del ataque, intervinieron aviones rusos. Cuando las defensas del ejército sirio cerca de las ciudades de Qminas y Nayrab fueron quebrantadas, los bombarderos rusos Su-24 atacaron, destruyendo los vehículos blindados de la oposición. Las fuerzas del gobierno sirio pudieron entonces retomar las posiciones.
El Ministerio de Defensa de Turquía informó de que dos soldados turcos habían muerto y otros cinco habían resultado heridos en un ataque aéreo, pero no especificó de quién era el ataque aéreo responsable de las muertes. Fahrettin Altun, director de comunicaciones de la administración presidencial turca, aclaró más tarde que los aviones sirios habían sido responsables del ataque mortal. Turquía respondió “neutralizando” a más de 50 soldados sirios, destruyendo dos transportes blindados, dos camionetas y un sistema antiaéreo, según informó el medio de comunicación turco Daily Sabah.
El 21 de febrero, el Centro Ruso para la Reconciliación de las Partes en Lucha en Siria informó de que un gran convoy de equipo militar y camiones con municiones se estaba trasladando de Turquía a Idlib.