Reino Unido pedirá el miércoles a China y Rusia que acuerden un enfoque internacional coordinado para evitar que Afganistán se convierta en un refugio para los militantes, según una declaración de la ministra de Asuntos Exteriores británica, Liz Truss, en las Naciones Unidas.
Los ministros de Asuntos Exteriores de Reino Unido, China, Rusia, Estados Unidos y Francia se reunirán con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, durante la Asamblea General de la ONU en Nueva York.
Reino Unido, que actualmente coordina el llamado grupo P5 de miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, aprovechará la reunión para pedir una mayor cooperación para mejorar la seguridad internacional, con especial atención a Afganistán.
La rápida toma de posesión de Afganistán por parte de los talibanes, tras la retirada de las tropas de Estados Unidos, Reino Unido y la OTAN el mes pasado, ha hecho temer que el país vuelva a ser utilizado como campo de entrenamiento de militantes islamistas.
“Si queremos evitar que Afganistán se convierta en un refugio para el terrorismo mundial, la comunidad internacional -incluidas Rusia y China- tiene que actuar de forma unificada en su compromiso con los talibanes”, dijo Truss en una declaración previa a la reunión.
Los talibanes han prometido que no permitirán que Afganistán, donde Osama bin Laden planeó los atentados del 11 de septiembre de 2001 cuando estuvieron por última vez en el poder, vuelva a ser un lugar seguro para los grupos que planean atentar contra Occidente.
La semana pasada, en una reunión de un bloque de seguridad liderado por China y Rusia, el presidente chino Xi Jinping dijo que las “partes relevantes” en Afganistán deberían erradicar el terrorismo y que China proporcionaría más ayuda al país dentro de su capacidad.
El presidente ruso, Vladimir Putin, aprovechó un discurso en la misma cumbre para decir que Rusia necesita trabajar con el gobierno talibán, y que las potencias mundiales deberían considerar la descongelación de los activos de Afganistán.