El ex presidente ruso Dmitri Medvédev afirmó el martes que Moscú tiene derecho a utilizar armas nucleares para defender su territorio mientras el país intenta anexionarse zonas conquistadas de Ucrania.
Medvédev, que ejerce como vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, escribió en las redes sociales que el Kremlin utilizaría su “arma más temible” contra Ucrania si “la amenaza para Rusia supera el límite de peligro establecido”.
“Quiero recordarles – a los sordos que sólo se escuchan a sí mismos: Rusia tiene derecho a usar armas nucleares si es necesario”, dijo Medvédev, añadiendo que la advertencia “no era un farol”.
Según la doctrina nuclear rusa, Moscú puede utilizar la bomba cuando las armas convencionales amenacen “la existencia misma del Estado”, un principio que podría aplicarse a los peligros que corren los territorios ocupados incorporados mediante referendos.
Las declaraciones de Medvédev siguen a unos comentarios similares que hizo el jueves, en los que dijo que “cualquier arma rusa, incluidas las armas nucleares estratégicas”, podría utilizarse para defender su territorio.
Las amenazas se producen cuando el martes finalizaron los referendos sobre la adhesión a la federación en cuatro regiones de Ucrania ocupadas por Rusia: Donetsk, Luhansk, Kherson y Zaporizhzhia. Las votaciones son consideradas por Occidente como una farsa orquestada por Moscú para justificar una posible anexión del territorio.
El Kremlin ha recurrido a medidas cada vez más desesperadas en la guerra, como la primera movilización militar del país desde la Segunda Guerra Mundial, después de que el ejército ucraniano llevara a cabo un exitoso contraataque en la región ocupada de Kharkiv a principios de este mes. Los éxitos de Ucrania en el campo de batalla se deben en parte al creciente suministro de armamento avanzado por parte de sus aliados en Occidente.
Medvedev expresó sus dudas de que se produjera un “apocalipsis nuclear” si Rusia decidiera utilizar la bomba, afirmando que los países occidentales no responderían drásticamente si Moscú emprendiera tal acción.
“El suministro de armas modernas es sólo un negocio para los países occidentales basado en el odio hacia nosotros. Ya no. Los demagogos de ultramar y europeos no van a morir en un apocalipsis nuclear. Por lo tanto, se tragarán el uso de cualquier arma en el conflicto actual”, predijo Medvédev.
El miércoles, el presidente ruso, Vladimir Putin, convocó a 300.000 reservistas militares en Rusia, en una señal de que la guerra de siete meses en Ucrania no iba como estaba previsto. En lo que pareció ser una referencia velada a su capacidad nuclear, el presidente ruso advirtió que no iba de farol y que utilizaría cualquier medio para proteger su territorio.
El domingo, el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, advirtió que Rusia se enfrentaría a “consecuencias catastróficas” si decidía utilizar su opción nuclear y que Washington había explicado en privado a Moscú la naturaleza exacta de su respuesta en tal caso.
La semana pasada, el presidente de EE.UU., Joe Biden, advirtió que si Putin utiliza armas nucleares u otras no convencionales contra Ucrania la respuesta de EE.UU. será “consecuente”, también sin dar detalles explícitos.
Putin y sus aliados han hecho alarde de su capacidad nuclear en repetidas ocasiones desde el inicio de la invasión el 24 de febrero. Poco después del inicio de la guerra, el presidente ruso anunció que ponía sus fuerzas nucleares en alerta máxima.
Rusia posee el mayor arsenal de armas nucleares del mundo, según el instituto de investigación para la paz SIPRI de Estocolmo, que cifra la cantidad en 6.255.